Una familia de Arrecife lleva 53 días sin luz, después de que Endesa distribución les cortara el suministro por cambiar la tapa del contador el pasado 9 de junio. Además, ya han desembolsado más de 3.000 euros por una instalación nueva, siguiendo las indicaciones de la empresa, pero siguen a oscuras.
Desde entonces, la mujer, sus dos hijos y sus animales han tenido que dormir en casa de varios amigos, ante la falta de habitabilidad de la casa. “Vamos de sofá en sofá, estoy mentalmente desajustada”, confiesa la madre.
La afectada asegura que habló con la empresa por teléfono el 1 de junio para avisarles de que “iba a cambiar la caja del contador” de la entrada de la vivienda, porque la tapa de plástico se había roto y ésta no se vendía por separado. También apunta que informó de que “iba a romper el precinto”.
“Me informaron que solo tenía que avisarles cuando estuviera cambiado para ir a precintar otra vez y así lo hice. En esa llamada me ofrecieron abrir un expediente, pero preferí que lo abrieran cuando les volviera a llamar, porque no sabía qué día exacto me cambiarían la caja”, explica.
Seis días después, el 7 de junio, un electricista cambió la caja del contador y toda la instalación “funcionaba perfectamente”, según relata la afectada. Sin embargo, la pesadilla no comenzó hasta dos días después, el 9 de junio, cuando un trabajador de Endesa les cortó el suministro de la luz.
“Me colocó un cepo y me dio un número de teléfono de Sevilla donde informan sobre los expedientes abiertos a los clientes”, añade. Dos meses después, sigue sin luz en su casa.
Un sinfín de llamadas sin solución
Tras verse sin electricidad, la mujer decidió seguir las indicaciones de la empresa y se puso en contacto con la oficina de Sevilla. “Me dijeron que no me podían informar de por qué me habían cortado la luz porque eran asuntos internos”.
Por tanto, decidió llamar a e-distribución, la distribuidora de luz del grupo Endesa, pero desde entonces, tras identificarse con su DNI, le salta una grabación que se limita a comunicarle que tiene el suministro cortado “por causas administrativas”, dándole como solución que se ponga en contacto con la empresa comercializadora.
“Mi empresa comercializadora me dijo que no les habían notificado nada y, por tanto, no sabían que me habían cortado el suministro. Esta le escribió una queja a e-distribución y dos semanas más tarde del corte, les contestaron que a mí no me habían cortado el suministro y que no tenía ningún expediente abierto”, relata la afectada.
“Lo que más me fastidia ha sido la actitud de Endesa desde el principio”, insiste. Ante la falta de soluciones, la familia puso una reclamación a Consumo, y estos le remitieron la información de la distribuidora que exponía queel corte se debía “a que había cambiado la instalación y ésta no cumplía con la normativa vigente”.
Una nueva instalación de más de 3.000 euros
Con la esperanza de que éste fuese el paso final, la familia construyó una nueva instalación acorde a la normativa vigente, que además señala “que cambia cada año”. “Según el electricista, esta instalación es la que necesitaría una gran industria o un gran edificio de viviendas y, por tanto, exagerada e innecesaria para una vivienda unifamiliar como la mía”, subraya.
Entre el enganche, el aparato y el servicio, entre otros costes, la familia ya ha desembolsado más de 3.000 euros, una instalación que además incide que tendrá que “ceder a la empresa”.
“En el Real decreto 1048/2013 se especifica que si la instalación nueva es para uso de un único cliente, no existe la obligación de cedérsela, pero en la práctica, hasta que no se lo cedes para incluirlo en su nuevo activo, no te gestionan la solicitud, de esta forma la empresa es ahora propietaria de una instalación nueva que me ha costado más de 3000 euros, sin tener que gastar ni dinero, ni tiempo ni trabajo, solo se molestaron en ponerme un cepo”, explica.
“Si es cesión voluntaria, dónde está la voluntariedad, esto se llama obligación o chantaje, todo menos voluntario”, se queja la mujer.
"El electricista no era homologado"
El pasado 13 de julio, la familia recibió un mensaje de Consumo, donde e-distribución indicaba que el problema del corte de suministro se había producido porque “no avisó con antelación”, pero la mujer sostiene que eso es “mentira”.
“Tengo un WhatsApp del 1 de junio donde le explico al electricista que he hablado con Endesa y solo me han pedido llamar después de cambiarlo, así que puedo probar que no es verdad que no avisé”, subraya.
Además, la mujer añade que también se justificaron señalando que "el electricista no era homologado", pero esta defiende que “en ningún momento” le informaron de que el electricista debía ser homologado durante la llamada.
“Si todo el problema era ése, me lo podían haber dicho en el momento y yo habría contratado a uno homologado para quitar y poner de nuevo la caja, no hacía falta hacer tanto daño a una familia”, insiste.
La mujer explica que “ya está hecha la solicitud del nuevo contador, pero ahora hay que esperar un plazo de 30 días”, para que le respondan. Sin embargo, de momento, la pesadilla continúa para esta familia. “El día 9 de agosto hacen dos meses sin luz”, concluye.