Un turista denuncia que el hotel en el que pasó sus vacaciones en Lanzarote y que estaba infectado de chinches solo le haya indemnizado a él y su esposa con 100 euros. La mujer sufrió picaduras cuando pernoctaron en el Hotel Beatriz de Costa Teguise hace tres meses, donde otras dos huéspedes vivieron la misma experiencia como ya publicó La Voz.
El huésped y, en concreto, su mujer, que residen en Mallorca, se despertaron el primer día de estancia dándose cuenta de que "la cama estaba llena de sangre y ella con picaduras". "En ese momento bajamos a desayunar y lo dejamos dicho, y a las cuatro de la tarde la habitación seguía sin hacerse, por lo que fuimos a recepción y nos dijeron que nos iban a cambiar de habitación porque había habido un problema de protocolo", cuenta.
Tras aportar la reclamación y las pruebas gráficas de las picaduras y de las chinches en el colchón del hotel, le han indemnizado "con 100 euros por los daños ocasionados". "Si yo aceptaba ese dinero, ya no tenía derecho a reclamar una cantidad mayor pero no lo he aceptado porque encima yo tuve que comprar ropa mientras la mía la lavaban", indica.
"Nos comunicaron también que nos iban a limpiar la ropa y las maletas pero soy médico, con lo que ya sabía por dónde iba la cosa, así que fui a la habitación y me encontré todo el colchón lleno de chinches", explica.
A raíz de ello, desde el hotel le pidieron que pusiera toda su ropa y la de su mujer dentro de una bolsa aunque dice que "le extrañó tener que hacer eso", pero no le dio más importancia. "Luego me fui a la otra habitación y al día siguiente pregunté en la recepción para hablar con la directora pero me pasaron con el jefe de recepción que me pidió disculpas, pero no me gusta que me engañen, si hay chinches pues que me lo digan y punto", expone.
Sin embargo, el huésped y su esposa todavía no habían recuperado su ropa que el establecimiento se había llevado a lavar. "Le pregunté al jefe de recepción que dónde estaba mi ropa y me dijo que la mandaron ese día a la lavandería pero sobre las cinco de la tarde, la ropa todavía no estaba en la habitación", asegura.
Ya al día siguiente, el turista pidió la hoja de reclamaciones y la aerolínea con la que viajó le indicó que, "hasta que no llegara a su destino no era una reclamación, sino una incidencia". "Mi mujer fue al médico por las picaduras y le administraron un tratamiento, y después empecé los trámites para que nos indemnizaran", desvela el afectado.
El turista finaliza lamentándose por esta mala experiencia en Lanzarote porque, según dice, "es la isla canaria que más le gusta" y a la que ha viajado varias veces.