La batalla de las compañías aéreas por cobrar el equipaje de mano a los viajeros está viviendo un nuevo y polémico capítulo. El consejero delegado de la aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair, Michael O'Leary, ha respondido con insultos y burlas a la sanción de 107 millones de euros que le impuso el Ministerio de Consumo por "prácticas abusivas" por, entre otras infracciones, cobrar el equipaje de mano, tener que pagar por "asientos contiguos para acompañar a personas dependientes" o cobrar "una cantidad desproporcionada" por imprimir el billete en la terminal si no se dispone de él.
A raíz de estas sanciones, que la aerolínea tacha de "ilegales" y que el ministerio defiende que "ha aplicado con todo rigor", el presidente de la compañía irlandesa de bajo coste ha presentado una campaña de verano donde ha vestido de payaso al ministro español de Consumo, Pablo Bustinduy.
"Reserva precios locos antes de que un payaso suba los precios" o "antes de que algún payaso regule a precios más altos", son algunos de los mensajes de la campaña presentada este pasado 11 de febrero. De este modo, O'Leary advierte de que subirá los precios de los billetes para hacer frente a estas multas".
"Mi obligación es defender estos derechos y eso he hecho y seguiremos haciendo y ninguna campaña de presiones ni insultos me va a detener en la aplicación de la norma", recalcó este martes Bustinduy tras conocer el anuncio de Ryanair.
Junto a Ryanair, que afronta la multa más cuantiosa, también fueron sancionadas otras cuatro compañías de bajo coste como Vueling (con 39,2 millones), EasyJet (29 millones), Norwegian (1,6 millones) y Volotea (1,18).
Bustinduy confirmó a finales de 2024 las sanciones que propuso la Secretaría General de Consumo y Juego y desestimó los recursos interpuestos por las compañías. La investigación, que se había iniciado en 2023, calificó como "muy graves" las infracciones. El Ministerio de Consumo informó que las cuantías de las sanciones se calcularon con base "en los beneficios obtenidos por las compañías aéreas por las prácticas infractoras". Además, para las prácticas "muy graves" las sanciones podrían "alcanzar hasta entre seis y ocho veces" el beneficio ilícito. Estas sanciones pueden ser recurridas ante la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Nacional.
Además, Consumo ha prohibido a todas las compañías sancionadas continuar con la exigencia del pago de un suplemento por el equipaje de mano en cabina, exigir el pago de un sobrecoste para reservar asientos contiguos con menores, personas dependientes y acompañantes. Además, tampoco podrán impedir el pago en efectivo, ni imponer "una tasa desproporcionada y abusiva" por imprimir la tarjeta de embarque y prohibe "omitir información y falta de claridad en los precios publicados en su propia web.
