Una vez el verano ha concluido, muchos de nosotros dejamos de utilizar nuestra piscina y esperamos a que lleguen de nuevo los meses más calurosos del año para poder introducirnos en ella. Sin embargo, la realidad es que es el momento perfecto para interesarnos por las bombas de calor para piscinas con el objetivo de poder exprimir al máximo nuestra piscina durante los doce meses del año. A continuación te contamos todo lo que tienes que saber sobre este útil mecanismo.
¿Qué es una bomba de calor?
Antes de explicarte los beneficios y las principales características, conviene que tengas en cuenta que es una bomba de calor. Se trata de un calentador que replica el funcionamiento de un aire acondicionado, pero a la inversa. Por lo tanto, intercambia el calor con el ambiente exterior y lo utiliza para aumentar los grados de temperatura del agua de una piscina. De este modo, vamos a poder introducirnos en su interior en cualquier momento del día o del año.
Se trata de un método que es muy sencillo de utilizar y, además, también es muy eficiente y sostenible. Reuniendo todos los ingredientes que son necesarios para que sea recomendable llevar a cabo su instalación.
Cómo funciona una bomba de calor
El funcionamiento de las bombas de calor es muy sencillo, el mecanismo con el que cuentan permite extraer calor del aire y transferirlo al fluido refrigerante, apoyándose en un ventilador motorizado y en un evaporador.
El calor que extrae se transfiere a por el compresor al condensador, que es el encargado de calentar el agua de la piscina. Esto explica que el aire que expulsa el ventilador siempre sea más frío que el aire del ambiente. El aire caliente presente en torno a la bomba de calor es capturado a través de su mecanismo y se pone en contacto con el agua, favoreciendo un calentamiento gradual que nos va a ofrecer una mayor comodidad cuando nos metamos en la piscina.
Estas son las ventajas de tener una piscina climatizada
Más allá de la comodidad de tener una piscina climatizada, son muchas las razones que invitan a realizar esta inversión. Está demostrado que el agua caliente reduce el estrés y nos ayuda a estar más tranquilos. Además, también relaja la musculatura y mejora la calidad del sueño, ayudándonos a tener un sueño mucho más reparador.
Por si todo lo anterior no fuera suficiente para convencernos, no podemos olvidar que una piscina climatizada va a añadir valor a la propiedad y va a hacer que en el momento en el que queramos llevar a cabo la venta de la misma, vayamos a poder recuperar la inversión y añadir un extra.
Los motivos por los que merece la pena optar por una bomba de calor
Hasta ahora, te hemos explicado cómo funcionan las bombas de calor y cuáles son las principales ventajas que pueden llegar a ofrecernos. Sin embargo, lo que todavía no sabemos es cuándo merece la pena optar por una bomba de calor y cuáles son los diferentes motivos que nos van a ayudar a tomar la decisión. En primer lugar, conviene tener en cuenta que se trata de un método muy práctico, con una instalación muy rápida y sencilla. Por lo que va a ofrecernos beneficios de manera inmediata. Además, también se trata de una posibilidad que es muy económica. Pese a que inicialmente puede tener un coste algo más elevado, la inversión se amortiza muy pronto gracias al excelente consumo energético que ofrece y la gran durabilidad que presenta.
Por último, también es importante hablar de factores como la sostenibilidad, la seguridad y la eficiencia. En términos sostenibles, destaca que se trata de una alternativa que no daña al medio ambiente ni derrocha recursos naturales. Además de ser un recurso muy seguro y que está homologado por los diferentes organismos reguladores. En términos de eficiencia, gracias a que produce más energía térmica de la que utiliza, también se trata de una excelente opción que debemos valorar.
