Nadie dijo que iba a ser fácil la aventura del Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife en la División de Honor Plata Masculina, una categoría tremendamente igualada y que exige el máximo rendimiento a los jugadores sobre la cancha de juego. En la mañana del domingo, el San José Obrero recibía la visita de un rival directo en la lucha por la permanencia, sufriendo una dura derrota ante el Balonmano Alcobendas.
Fue el encuentro bastante igualado en sus primeros veinte minutos de la primera parte, siendo mínimas las diferencias y manteniendo intactas los dos equipos sus opciones de apuntarse la victoria. Gonzalo Velasco dirigía todas las acciones de ataque del Balonmano Alcobendas, encontrando siempre las mejores alternativas para batir a Javi de la Cruz. Más problemas tenía el Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife en ataque, pero los locales se mantenían en el encuentro.
En los últimos diez minutos de la primera parte, el Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife perdió varios balones en ataque y en uno de ellos, el guardameta Ramón Fuentes anotaba desde su área para aumentar la diferencia hasta los tres goles. Tenía que detener el partido Samuel Trives, y en el regreso a la cancha, Carlos González anotaba dos goles para reducir las diferencias.
El Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife probó diferentes sistemas defensivos en esta primera parte, comenzando el partido con una defensa 6:0 y jugando en varias fases con una defensa 5:1 con Rafa Robayna o Joel Armas en el avanzado. No dio los efectos deseados, y con el marcador de 12 a 15 se llegó al final de los primeros 30 minutos de encuentro.
El Balonmano Alcobendas puso tierra de por medio en el inicio de la segunda parte, aprovechando la fragilidad defensiva que estaban mostrando los locales. Los tantos de Gonzalo Velasco (2) y José María Gutiérrez, pusieron el 14 a 20 en el marcador, teniendo que solicitar Samuel Trives el segundo tiempo muerto del partido y viendo como los madrileños se marchaban con 6 goles de ventaja.
Tuvo una tímida reacción el Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife, anotando Joel Armas un contragolpe para poner a su equipo tres goles abajo (23-26). Incluso tuvieron los locales varios ataques para ponerse a solo dos goles, pero volvieron las pérdidas y las precipitaciones en los lanzamientos. El San José Obrero llegó a jugar con una defensa doble mixta sobre los jugadores importantes del Alcobendas, pero no se encontraban las soluciones.
El extremo Mario Crespo encontró en los minutos finales un “pasillo” por el lado derecho de la defensa y anotó con excesiva facilidad hasta siete goles en esta segunda parte. Era un querer y no poder por parte del Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife, y el Alcobendas controlaba el choque a su antojo.
Con el marcador de 29 a 35 se llegó al final del encuentro, sufriendo el Balonmano Lanzarote Ciudad de Arrecife una dura derrota ante un rival directo en la lucha por la permanencia en la División de Honor Plata Masculina. Toca levantarse y preparar el partido del próximo fin de semana ante el Fertiberia Puerto Sagunto.