Manuel Lezcano, reconocido surfista local de La Santa, es uno de los atletas confirmados para la 9ª edición del LANZAROTE QUEMAO CLASS, el evento, que una vez más, reunirá a los mejores surfistas y bodyboarders nacionales e internacionales en Lanzarote.
Desde pequeño, Lezcano vivió de cerca la esencia de esta ola gracias a su padre, quien lo llevaba a observarla en días épicos. Con el tiempo, su conexión con el Quemao se profundizó: “Cuando empecé a surfearla, ya tenía todo bastante claro, y surfeaba muchas horas cada día en otras olas de la isla, así que fue increíble dar el paso y disfrutarla desde tan pronto”, recuerda.
El LANZAROTE QUEMAO CLASS ha crecido enormemente desde sus inicios, según Manuel, gracias a su formato único, que prioriza las condiciones óptimas del mar y atrae a los mejores surfistas y bodyboarders del mundo por invitación. “El campeonato siempre ha tenido un impacto increíble en el mundo del surf. Aunque no pertenece a ningún circuito, la ola en sí es el mayor reclamo. Siempre ha sido un evento a tener en cuenta por todos”, destaca.
Para un local como Lezcano, competir en su propia ola es un desafío. Aunque supone una ventaja conocer cada detalle de la ola del Quemao, también implica una presión añadida. “Desde el primer año del evento, tenía claro que cambiar el chip y competir en la ola que más alegrías y grandes momentos me ha dado sería complicado, porque mi objetivo habitual en la ola es muy diferente al objetivo de una manga en competición. Pero disfruto mucho del evento y cada ola igualmente”, asegura.
Y es que esta ola es conocida por su potencia y espectacularidad. “En el aspecto deportivo, trabajo mucho en ajustar mis tablas lo máximo posible para cada tipo de condiciones y en estar físicamente preparado para la temporada. Además, me organizo para no perderme ni un minuto de los días en los que la ola rompe, ya que son muy pocos al año.”
Para Lezcano, la cantera de surfistas de Lanzarote es motivo de orgullo: “Ahora mismo tenemos una de las mejores canteras del mundo. Los jóvenes están preparados para todo lo que se propongan.” Además, el LANZAROTE QUEMAO CLASS ha inspirado a las nuevas generaciones desde sus inicios: “Muchos de los que ahora forman la lista de competidores, y lo harán en próximas ediciones, empezaron entrando al agua con nosotros para llevarnos las tablas de repuesto durante la competición. Llevan años viviéndolo de cerca y aprendiendo de los mejores para cuando les llegue su turno.”
El LANZAROTE QUEMAO CLASS no solo posiciona a Lanzarote en el mapa del surf internacional, sino que también refuerza su identidad como un destino de olas de calidad mundial. Manuel aplaude el papel del Cabildo de Lanzarote y otras instituciones locales en este éxito: “Por fin tienen un proyecto realmente interesante para el surfista local. Esto beneficia tanto a la cantera como al surf en general en la isla.”
Más allá de la competición, el LANZAROTE QUEMAO CLASS es una oportunidad para mostrar al mundo la esencia de Lanzarote. “Desde hace años, la isla es reconocida por sus olas, primero con los mejores del mundo entrenando aquí, después con pruebas de la liga mundial, y ahora con este evento”, explica Manuel, destacando el impacto que tiene en la proyección internacional de la isla.
Con el pueblo pesquero de La Santa como escenario y una cantera de surfistas de renombre, el LANZAROTE QUEMAO CLASS sigue consolidándose como un referente a nivel mundial, ofreciendo una experiencia que combina deporte, naturaleza y cultura.