El pleno del Parlamento de Canarias ha acordado pedir al Gobierno autonómico que modifique la Ley de prevención y protección integral de las mujeres contra la violencia de género para incluir la violencia vicaria, es decir, el asesinato o violencia ejercida sobre las hijas o hijos para causar el mayor daño psicológico por las exparejas.
"La violencia vicaria ataca al corazón mismo de las familias, son vidas rotas, hogares destrozados y un silencio que clama justicia", dijo la diputada de Nueva Canarias Natalia Santana, promotora de la iniciativa, a la que incorporó enmiendas de Coalición Canaria y contra la que votaron los tres diputados de Vox.
Santana defendió que la legislación canaria sobre violencia de género, que data de 2003, necesita actualizarse para incluir explícitamente la violencia vicaria, porque es necesario un reconocimiento más claro, una prevención más efectiva y unas sanciones adecuadas.
Desde 2013, 63 menores han sido asesinados en casos de violencia vicaria en España y en Canarias hay 95 menores en riesgo de agresión por el maltratador de sus madres, expuso la diputada.
El Parlamento canario pide la actualización de la ley canaria pero también reclama al Gobierno de España la implementación de un protocolo homologado a nivel estatal de detección de sucesos de violencia de género y doméstica en los centros escolares.
Otra de las demandas es que el Gobierno canario desarrolle programas de formación para el personal de educación, sanidad, servicios sociales y cuerpos de seguridad en torno a la identificación y actuación ante casos de violencia vicaria y otros tipos de violencia de género.
El establecimiento de protocolos de actuación rápida para la protección de mujeres y sus hijos ante situaciones de violencia vicaria, la creación de un sistema de monitoreo y seguimiento de los casos de violencia vicaria y de un observatorio de violencia vicaria, la implementación de protocolos de detección en los centros educativos y potenciar los recursos humanos en los juzgados son otras de las demandas.
La diputada de Vox Paula Jover justificó el voto en contra de su grupo parlamentario porque a su juicio "se está utilizando a las víctimas de la violencia para dividir a la sociedad y enfrentar a los hombres y a las mujeres".