La Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Canarias ha desestimado el recurso de apelación presentado por la defensa de Pau Solá, condenado por violar a una joven en un un rellano de Arrecife en el verano de 2022.
La Sala confirma así la condena por violación a ocho años de prisión que dictó la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas el pasado 13 de octubre. A este fallo hay que sumarle la accesoria de inhabilitación especial del derecho al sufragio pasivo durante el tiempo de la condena. Además de nueve años de libertad vigilada y la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de la víctima, su domicilio, su lugar de trabajo y cualquier otro frecuentado por ella.
Pau Solá también ha sido condenado por un delito leve de lesiones, con el pago de dos meses de multa con una cuota diaria de seis euros, así como una indemnización de 296 euros por daños físicos y 6.000 euros por daños morales a la víctima.
Los hechos ocurrieron en el verano de 2022, cuando el condenado y la víctima se conocieron en un bar de la calle San Francisco Javier de Arrecife. La sentencia recoge que ella se encontraba bajo los efectos del alcohol y él, "con pleno conocimiento de que carecía de la capacidad necesaria para prestar conocimiento alguno", la cogió del brazo, la empujó. A pesar de que ella quería zafarse de él", él condenado le iba metiendo las manos por debajo del pantalón, la llevó a un rellano, de una vivienda en la capital de Lanzarote y la penetró vaginalmente, tras bajarle el pantalón y la ropa. Luego, la dejó tirada en el portal.
La violación le ocasionó diversas lesiones en el pecho, en los brazos, en la ceja o en el glúteo.
El fallo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias dió por probados todos los antecedentes de hechos y hechos de la sentencia recurrida por la defensa del condenado. Mientras que, señaló que el recurso presentado por el letrado no contaba "con fundamentación procesal ni sustantiva".
Además, resaltó que el estado de inconciencia de la víctima cuando fue encontrada en el portal quedó probado y fotografiado. Incluso varios testigos relataron que la víctima se tambaleaba antes de los hechos.
