La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo ha inadmitido el recurso de casación interpuesto por Papagayo Arena SL contra la sentencia de la Sección Segunda de la Sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias dictada en febrero de 2021, que anulaba el acuerdo alcanzado por el Ayuntamiento de Yaiza y la empresa para la legalización del hotel Papagayo.
La licencia fue anulada como consecuencia de los procedimientos interpuestos por el Cabildo de Lanzarote y la Fundación César Manrique en defensa de la legalidad, al contravenir tanto el Plan Insular como la propia ordenación municipal. Como consecuencia de la anulación de esa primera licencia, el promotor del hotel presentó un proyecto de legalización que fue desestimado en 2016 por la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Yaiza, mediante un acuerdo que reconocía la imposibilidad de legalización del hotel Papagayo.
El acuerdo de la Junta de Gobierno advertía que lo construido no se adaptaba a las determinaciones establecidas en el Plan General de Ordenación Urbana del Municipio de Yaiza, Plan Supletorio, y requería a la propiedad la presentación de “un proyecto en el que se contemple, de forma pormenorizada y detallada todas las medidas técnicas a ejecutar, incluida la demolición parcial (si fuera necesaria) a fin de ajustar la edificación al Planeamiento Municipal en el plazo de un mes a contar desde la notificación de la resolución”.
Contra esa resolución del Ayuntamiento de Yaiza, la empresa interpuso un contencioso-administrativo del que no se dio traslado ni al Cabildo de Lanzarote ni a la Fundación César Manrique, "apartándolos de manera intencionada de un procedimiento que estaba orientado a la ejecución de la sentencia a favor de las tesis sostenidas por ambas instituciones", señala la Corporación insular, que ahora ha hecho público este fallo, que anula el acuerdo alcanzado dentro de ese procedimiento paralelo.
"Sorprendente mediación"
"De manera sorprendente, en el seno de dicho contencioso-administrativo se produjo un procedimiento de mediación intrajudicial en el que el Ayuntamiento de Yaiza y la empresa promotora alcanzaron un acuerdo para legalizar lo construido y dar por ejecutada la sentencia, sin participación ni control de quienes habían denunciado ante los tribunales la demostrada ilegalidad de la licencia concedida al hotel. Fruto de tan sorprendente mediación, fue el auto de 6 de noviembre de 2019, dictado por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Las Palmas de Gran Canaria, que daba por ejecutada la sentencia de nulidad de la licencia y legalizaba de facto el hotel Papagayo", señalan desde la Corporación insular.
Tras tener conocimiento de tal circunstancia, tanto el Cabildo como la Fundación César Manrique interpusieron el oportuno procedimiento contencioso-administrativo, ahora resuelto en favor de ambas instituciones, en el que sostenían que el proceder del Ayuntamiento de Yaiza y la promotora del hotel privaba tanto al Cabildo como a la Fundación de su derecho a la tutela judicial efectiva vulnerando, además, el derecho a la ejecución de las resoluciones judiciales. Igualmente, los servicios jurídicos del Cabildo sostenían que el acuerdo homologado por el auto no se ajustaba al ordenamiento jurídico por fraude de ley y versaba sobre materias no susceptibles de transacción, infringiendo la ley que regula la jurisdicción contencioso-administrativa.
Fruto de la acción llevada a cabo por los servicios jurídicos de las entidades denunciantes, el TSJC ya anuló el auto, dejando sin efecto el acuerdo de mediación intrajudicial "tramitado a espaldas de quienes habían denunciado la irregular concesión al hotel Papagayo".
Contra dicha sentencia, la propiedad de la instalación hotelera interpuso recurso de casación ante el Tribunal Supremo, que es el que ahora ha sido rechazado, no admitiéndolo siquiera a trámite, por lo cual adquiere firmeza la sentencia del TSJC que anulaba la mediación intrajudicial.
“No puedo más que mostrar mi satisfacción por esta sentencia que afortunadamente hace que impere la legalidad y la cordura”, ha declarado la presidenta del Cabildo, María Dolores Corujo. “El acuerdo anulado era un auténtico disparate porque lo hicieron quienes han incumplido la ley -ayuntamiento y empresario- ocultándolo al Cabildo para tratar de legalizar la gravísima ilegalidad que se cometió con la construcción del hotel invadiendo una calle peatonal prevista en el planeamiento para dividir la parcela hotelera y evitar el cerramiento de la playa por una 'mole' de hormigón como la que se ha hecho”, recuerda.
Sentencia sin ejecutar
Por último, la presidenta también ha recordado la reciente resolución dictada por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 5 de Las Palmas, el pasado 21 de enero de 2022, en la que se declara que el Ayuntamiento de Yaiza tampoco ha ejecutado la sentencia que anuló la licencia "que está en el origen de la grave ilegalidad cometida con la construcción de este hotel", por la que el Ayuntamiento de Yaiza autorizó la “agrupación” de dos parcelas que estaban separadas por un vial peatonal de 5 metros de ancho, concluyendo que “las infracciones urbanísticas materiales impiden la legalización de la edificación, por lo que en cumplimiento de la sentencia que se ejecuta se debe ordenar, con base en la declaración de nulidad radical de los actos, el restablecimiento de la legalidad urbanística y territorial infringida, llevándose a cabo las actuaciones necesarias para ello”.
La presidenta del Cabildo considera "inconcebible que el Ayuntamiento de Yaiza se haya pronunciado de manera sistemática en favor de quienes incumplen no ya la normativa de carácter insular, sino el propio planeamiento municipal" y ha recordado que fue "la propia Junta de Gobierno Local la que determinó la imposibilidad de legalizar lo edificado".
“Los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Yaiza habían dado luz verde a un acuerdo, afortunadamente anulado, que pretendía legalizar lo que el propio gobierno municipal consideraba de imposible legalización”, subraya Corujo.