“Te has hinchado” y “tú vas a salir rico” son algunas de las frases que el expresidente del Cabildo, Pedro San Ginés, dirigía a su amigo Ignacio Calatayud, en las conversaciones de Whatsapp que han sido analizadas por la UCO, a través del Equipo contra el Crimen Organizado.
En la causa se investigan delitos de malversación de caudales públicos, cohecho y blanqueo de capitales, entre otros, por los pagos que San Ginés autorizó a Calatayud durante su Presidencia.
“Te hacen falta tres vidas para agradecer lo que has ganado conmigo”, le llegaba a decir el expresidente al abogado en otra de esas conversaciones.
Cuando estalló públicamente esta causa, los agentes registraron tanto el domicilio de Pedro San Ginés como el de Ignacio Calatayud, e intervinieron sus teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos. Y tras el análisis de su contenido, ya han elevado sus informes al Juzgado que instruye el procedimiento. En ellos, destacan decenas de comunicaciones entre San Ginés y Calatayud, muchas de ellas después de que se empezaran a hacer públicos los hechos que después dieron lugar al inicio de esta causa.
“Se han localizado varios archivos de los que se desprende cierto estado de nerviosismo por las posibles consecuencias que pudieran tener para los investigados las distintas publicaciones realizadas por parte de la nueva dirección del Cabildo de Lanzarote y las futuras acciones legales derivadas de los procedimientos investigados”, señalan los agentes en uno de sus informes.
“Te confieso que ahora sí estoy...”
“Pero Nacho, esto que dicen es gravísimo. Si no van a ir a los tribunales, lo parece. Y si no van, ¿por qué no vamos nosotros? Disculpa, te confieso que ahora sí estoy...”, les escribía Pedro San Ginés a Calatayud en uno de esos mensajes, tras publicarse que el abogado se pudo haber “apropiado” indebidamente de las costas judiciales, que tenían que haber ido “a la masa activa de Inalsa, para pagar a los acreedores”.
“Es que eso de la masa activa, ¿estará escrito en alguna parte? Ya sé. Que les pregunten a los administradores”, agregaba San Ginés, anticipándose a la respuesta que iba a recibir del abogado.
El expresidente se refería así a los cuatro administradores concursales de Inalsa, que ahora están imputados también en esta causa. En el caso de uno de ellos, Pedro Martín, la investigación ha descubierto que su mujer mantenía una “relación laboral” y de “amistad” con Calatayud.
“Coño, Nacho, solo trato de entender”
Conforme se iban conociendo nuevos datos de esta causa, San Ginés y Calatayud intercambiaron muchas conversaciones similares. Una de ellas, tras publicarse que el primer abogado de Inalsa en el procedimiento concursal, Juan José Cobo Plana – al que San Ginés sustituyó por Calatayud al llegar a la Presidencia-, incluía en su presupuesto todos los incidentes concursales, que Calatayud sin embargo cobró a parte, disparando sus honorarios.
“Coño, Nacho, yo solo trato de entender y es normal que haga preguntas, especialmente la primera vez que veo algo distinto (por más que sea un montaje jurídico) a una puta nota de prensa mentirosa. Y no tienes que ponerte así por eso. Venga, vamos a relajarnos, que la batalla es larga, y de éstas salimos juntos o no salimos. Y tenemos que salir porque somos inocentes. Tú rico y yo pobre, pero inocentes los dos”, le decía el expresidente a Calatayud en otro mensaje, tras hacerse públicas las diferencias entre ambos contratos.
Un “pobre” con bienes valorados en casi 800.000 euros
Al igual que ha hecho públicamente, San Ginés aludía en más de una ocasión en esos mensajes a su situación económica, usando incluso la palabra “pobre”. “El único que se ha hinchado eres tú (me alegro por ti) y yo estoy más tieso que la “mojama”, le decía a Calatayud.
Sin embargo, tras el rastreo de sus bienes, los agentes han cifrado el patrimonio de Pedro San Ginés en casi 800.000 euros, solo en las propiedades que han sido embargadas por orden judicial, y que incluyen dos chalets, una embarcación Zodiaz PRO y varios coches y motocicletas.
Una de esas casas es una pieza clave en la investigación, ya que pertenecía a la sociedad de la mujer de Calatayud, Juana Fernández de las Heras, y del padre de ésta, Felipe Fernández Camero. Los investigadores creen que en esa operación de venta -de la que han encontrado distintos contratos, en los que el precio se iba reduciendo-, pudo haber un soborno al expresidente, a cambio de las millonarias adjudicaciones a Calatayud.
“El pantallazo lo borras, que eres un bocas”
“Escucha... El que tendrías que agradecer eres tú”, le respondió Ignacio Calatayud a San Ginés, cuando le dijo que le harían falta “tres vidas para agradecer” lo que había ganado con él. En ese momento, al igual que se refleja en otras comunicaciones, la conversación había entrado en un momento tenso, tras intercambiar comentarios y documentos sobre las noticias que se iban publicado.
“Y tú calladito... Y el pantallazo lo borras, que eres un bocas...”, advertía el abogado al remitirle uno de esos documentos. Ese cuestionamiento sobre su falta de discreción, que se repite en otros mensajes, generó la respuesta de San Ginés reclamando gratitud.
Para los agentes, éstas y otras conversaciones “ponen de manifiesto ese estado de preocupación e incertidumbre de los encartados” ante la información que se iba haciendo pública, y que terminó con la interposición de una querella que dio lugar a esta causa.
“Y les queda la traca final, no tengas duda. La traca final es el millón y pico de euros que habrás cobrado de eso... que ya sé que son tuyos pero que ellos lo van a utilizar para hacer ruido, no tengas ninguna duda... todo esto tiene su guinda”, aventuraba San Ginés en un mensaje, que confirma que sí era consciente de la suma recibida por Calatayud, pese a que durante años ha intentando minimizar esa cantidad, e incluso durante su Presidencia ocultó la información y “mintió” a la oposición, según sostiene el sumario de esta causa.
“Al menos nos quedarán las esculturas”
Solo por su intervención en el procedimiento concursal de Inalsa -que es lo que se investiga en esta causa penal-, los honorarios que cobró Calatayud superaron el millón y medio de euros, y a eso hay que sumar todos los demás pleitos que le asignó San Ginés durante su mandato, tanto del Cabildo como de todos sus entes dependientes, con derrotas como la de la Cueva de Los Verdes.
En medio, se han ido sumando también otras polémicas, como la del museo submarino que San Ginés decidió construir con dinero público frente al puerto deportivo ilegal Marina Rubicón, y para el que Calatayud hizo de modelo.
Tras publicarse esa información, San Ginés escribió al abogado. En el mensaje le decía que el actual consejero de los Centros Turísticos había dado una rueda de prensa “para decir que el museo era para hacerle figuritas a los amigotes de Pedro”. “Nada, ya estás retratado. Lo siento amigo”, añadía. “Mi amistad contigo me va a costar la carrera!!! Al menos quedarán las esculturas!!!”, le respondía Calatayud.
En sus declaraciones en los tribunales, en la causa por la incautación de la desaladora de Montaña Roja, el abogado negó que hubiera una “amistad” entre ambos, pese a que San Ginés sí lo había reconocido públicamente.
