El pulmón, la única parte del cuerpo de la joven Romina Celeste que se consiguió recuperar después de que su marido la matase en la Nochevieja de 2018, ha sido destruido.
Este órgano fue localizado por un socorrista en enero de 2019 en la playa de Las Cucharas de Costa Teguise y sirvió como parte de las pruebas que se utilizaron para demostrar que su marido Raúl Díaz Cachón había acabado con su vida.
Su madre Miriam Rodríguez quería llevárselo a Paraguay, la tierra natal de ambas, para darle sepultura. Sin embargo, no fue posible. Ahora, según ha adelantado la abogada de la familia Emilia Zaballos, el órgano ha sido destruido.
Lo único que quedaría del cuerpo de Romina Celeste serían las placas de ADN que se extrajeron del pulmón de la víctima y que fue cotejado con el de su madre. Esta sería la parte que el Instituto Anatómico Forense le haría llegar a Miriam.
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