Acepta seis meses de cárcel por amenazar a otro hombre con difundir fotografías de contenido sexual

Contactó con él a través de una aplicación y luego le pidió 3.000 euros para no hacer públicas las imagenes y las conversaciones que habían compartido. Ahora ha aceptado un acuerdo de conformidad

I.L.

Periodista

3 de febrero de 2022 (10:27 CET)
Suspensión juicio caso Montecarlo (FOTO: José Luis Carrasco)
Suspensión juicio caso Montecarlo (FOTO: José Luis Carrasco)

Seis meses de prisión y una indemnización a la víctima de 500 euros por los daños morales. Ésa es la condena que pide la Fiscalía de Arrecife para un hombre que ha confesado haber amenazado a otro con difundir imágenes y conversaciones de contenido sexual si no le entregaba 3.000 euros.

El juicio se iba a celebrar ante un tribunal de jurado, pero la defensa ha alcanzado un acuerdo de conformidad por el que el acusado aceptará esa pena, con la que podría eludir el ingreso en prisión. La vista para ratificar el acuerdo está previsto que se celebre el próximo 10 de febrero ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas.

Los hechos ocurrieron en Lanzarote el 17 de agosto de 2019, cuando el acusado contactó con la víctima a través de la aplicación “Grinder”. A partir de ahí, según relata la Fiscalía en su escrito de acusación, mantuvieron “conversaciones de índole sexual” y compartieron “fotografías íntimas”.

Ese mismo día, “con ánimo de atemorizar al perjudicado y de obtener un beneficio patrimonial ilícito”, el acusado llamó en varias ocasiones a la víctima y le envió tres mensajes de Whatsapp, en los que le exigía el pago de 3.000 euros a cambio de no difundir las imágenes y las conversaciones.

“Como consecuencia de los hechos, estuvo sometido a un estado de preocupación y desasosiego ante la presión a la que el acusado les sometía y la incertidumbre de si éste en cualquier momento cumpliría su anuncio de divulgar el material de autos”, relata el Ministerio Fiscal.

No obstante, en lugar de ceder a las amenazas acudió a presentar una denuncia, que fue la que dio lugar a esta causa. A raíz de ella, el acusado pudo ser identificado, pese a que había utilizado una tarjeta prepago y el móvil de una tercera persona, que la Fiscalía subraya que “desconocía” su “propósito”.

Una vez fue localizado, el hombre confesó tanto en sede policial como después en los Juzgados. “Desde el inicio de las presentes actuaciones ha mostrado una actitud de arrepentimiento”, subraya la Fiscalía, que ha aplicado como atenuante su confesión para rebajar la pena. Además, también ha sumado otra atenuante por “reparación del daño”, ya que explica que el acusado ha depositado en la cuenta del Juzgado la cantidad de 500 euros, “en concepto de responsabilidad por los daños morales causados”.

Además, en el acuerdo de conformidad también se compromete a pagar las costas del juicio.