El Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, la Policía Nacional y la Guardia Civil interceptó el pasado 21 de febrero en una operación conjunta a un velero que transportaba 200 kilogramos de cocaína en ocho fardos. En concreto, se trata de una embarcación de once metros de eslora y bandera venezolana, bajo el nombre de Assashio.
Tras el abordaje por el patrullero Petrel de Vigilancia Aduanera se ha procedido a la detención del único tripulante, de nacionalidad portuguesa, trasladándose la carga al patrullero, dado el estado de deterioro del velero que provocó su posterior hundimiento.
La sustancia estupefaciente se encontraba repartida por el interior de la embarcación sin ningún tipo de ocultamiento, algo lógico dadas sus reducidas dimensiones. El operativo ha sido fruto de la colaboración internacional gracias a inteligencia de los Servicios de Aduana de Francia (DNRED) y de la DEA de Estados Unidos, canalizada a través del Centro de Análisis contra el Narcotráfico Marítimo en el Atlántico (MAOC) y coordinado por el Centro de Inteligencia con el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO).
El operativo ha culminado con la llegada del Petrel este miércoles al puerto de Vigo, para la descarga de la droga y posterior traslado del detenido a la Audiencia Nacional por parte de Guardia Civil, Vigilancia Aduanera y Policía Nacional.
Ruta atlántica
Esta operación se suma a las ya efectuadas por la Agencia Tributaria y las Fuerzas de Seguridad en la lucha contra el tráfico de drogas en la denominada Ruta Atlántica de la cocaína, conocida por ser utilizada por pesqueros, mercantes, embarcaciones semirrígidas y, como en esta ocasión, veleros procedentes de Sudamérica y el Caribe, trasbordan las sustancias estupefacientes en mitad del Atlántico para su posterior introducción en el continente europeo.
El éxito de este tipo de actuaciones es fruto del trabajo de colaboración entre varios organismos europeos y nacionales (MAOC, CITCO) y los diferentes cuerpos policiales y aduaneros, así como, en este caso, de la cooperación de las autoridades de DNRED y de la DEA.