La sección sindical en el Centro Penitenciario de Tahiche de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) ha denunciado una agresión “muy grave” por parte de un interno a otro, provocándole un corte en la cara “desde la oreja hasta la mandíbula”.
Según apuntan desde el sindicato, los hechos tuvieron lugar en el módulo 5 sobre las 17:30 horas de este domingo, cuando el interno J.J.S.R. se acercó a la cabina de los funcionarios “para hablar con ellos”. Ese momento fue aprovechado por el otro interno, FAO, para, sin previo aviso, “cortarle la cara”.
Desde el sindicato señalan que el corte se produjo con “la tapa de una lata de mejillones”. Debido a la gravedad de las heridas, el interno fue atendido incialmente en la enfermería del centro, pero posteriormente tuvo que ser trasladado al hospital.
Acaip informa que le tuvieron que dar “un total de 23 puntos de sutura”, lo que le provocará “secuelas persistentes”. Por fortuna, apuntan desde el sindicato, y gracias a unos centímetros de diferencia, “no han sido peores las consecuencias”, pues de haberse producido el corte “unos centímetros más abajo las consecuencias hubiesen sido letales”. Por su parte, el agresor fue trasladado al módulo de aislamiento.
Acaip subraya que los hechos se produjeron en el módulo de ‘pre-respeto’, “donde inexplicablemente se encontraba el interno agresor, el cual ha sido protagonista de diferentes actos violentos hacia otros internos e incluso se le interceptó un teléfono móvil hace escasos días”.
El sindicato apunta que, como se ha denunciado en diferentes ocasiones, “se vuelven a producir actos violentos protagonizados por internos especialmente conflictivos, que han sido trasladados de las prisiones de otras islas a ésta”. En este caso, detallan que se trata de un interno “con graves antecedentes disciplinarios tanto ante funcionarios como hacia otros reclusos”.
Por último, desde Acaip señalan que no fue el único incidente que se produjo en la prisión durante ese día. Al respecto, afirman que poco después del relevo de trabajadores, “un interno del módulo 4 se autolesionó, provocándose cortes en los brazos que necesitaron de asistencia sanitaria en la enfermería del centro”.
