El joven de 22 años que agredió a dos guardias civiles en el aeropuerto de Lanzarote el pasado sábado ha sido condenado por tres delitos, con una pena de 12 meses de multa a razón de seis euros al día por un delito de resistencia a la autoridad y una pena de 40 días de multa a razón de seis euros al día por dos delitos leves de lesiones.
A eso se suma una indemnización de 175 euros para cada uno de los agentes, que fueron defendidos por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), en concepto de responsabilidad civil. Los dos agentes están de baja médica tras las lesiones sufridas durante el forcejeo.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Arrecife ha tomado esta decisión después de que el hombre fuese detenido por abalanzase sobre un agente tras mantener una discusión con una trabajadora porque su madre no podía viajar y herir a otro, según informaron este domingo fuentes de la investigación.
Cuando los guardias llegaron al lugar, el hombre, de forma agresiva, vociferó que su madre viajaría sí o sí. "Por mis cojones que mi madre va a volar sin pagar nada, que la Guardia Civil no manda nada sobre mi, que si mi madre no viaja la voy a liar gorda", gritó.
Los agentes lo identificaron y le pidieron que depusiera su actitud, pero su respuesta fue abalanzarse sobre uno de los agentes, que necesitó la ayuda de su compañero para reducirlo y proceder a su detención. Durante la actuación, el hombre propinó patadas y puñetazos a los agentes, provocándoles lesiones.
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