Imagen:Sergio Betancort
Ambientazo en el multitudinario desfile del Carnaval de PlayaBlanca. El pueblo salió al paso del coso para contagiarse de la alegría irradiada por batucadas, grupos de baile, centenares de mascaritas y una docena de originales carrozas y acompañantes. Más de seis mil personas, entre los que contaban muchos turistas, disfrutaron del animado cortejo sureño.
El público aprovechó la tarde veraniega de este sábado para instalarse desde bien temprano a la lado y lado del trazado. El coso arrancó desde la zona de Flamingo iluminado con la última hora de sol. En los primeros metros de recorrido, desde el punto de partida hasta la rotonda del muelle, se podía ver un significativo número de espectadores, que poco a poco fue creciendo, en la medida que el desfile se acercaba al centro de Playa Blanca.
En la Avenida de Canarias también era notoria la presencia de público, pero la entrada del coso a la Avenida Papagayo fue sencillamente apoteósica. Los asistentes, de excelente comportamiento, respetaron el vallado ordenado en los márgenes de la calle y disfrutaron sin problemas del espectáculo. La noche cayó sobre Playa Blanca y las miles de personas concentradas alrededor del coso no cesaban en su intento de conseguir la mejor instantánea.
La figura del siempre aclamado Charlot abanderó el desfile carnavalero. A partir de la caracterización de uno de los grandes maestros del cine, aparecieron majestuosos grupos de baile con movimientos cadenciosos al ritmo de los inconfundibles tambores de batucada. Las palmas y vítores del respetable acompañaron.
Ya la fiesta estaba más que prendida, pero faltaba la "invasión" de carrozas. Los vehículos decorados son atractivo indiscutible del Carnaval. No decepcionaron en Playa Blanca, como tampoco lo hicieron las cientos de mascaritas, niños, jóvenes y adultos, que tiraron de ingenio y material reciclado para reírse de la realidad e ironizar sobre la crisis. Todos ellos, junto al público, coprotagonistas del Carnaval, merecen el mayor reconocimiento. El Ayuntamiento de Yaiza, a través de la Concejalía de Festejos, agradece su incalculable aportación a la fiesta.
Las carrozas que engalanaron el desfile, en su orden, fueron: Mario Bross, JR, Jonny Amigos, Mariposa Reciclada, Mazinger Z, Rubimar, Época de Piratas, Carroza Cavernícola, Cotton Club, ocupada por mayores de Yaiza, La Invención de Hugo, ganadora del primer premio en el Carnaval de Arrecife, El Circo y el Grupo Fregona.
Por el coso de Playa Blanca pasearon hombres y mujeres de los años veinte, personajes infantiles, empleados de 'Correos', viejillos y viejillas que no sienten la edad, payasos, chicas y chicos atrevidos marcando tendencia en la moda, viudas alegres, superhéroes no tan musculosos como Superman o Batman y con barriga, pero más alegres y cercanos, y un sinfín de disfraces que lograron su objetivo: arrancar carcajadas y que el público se lo pasara bien, como fue la constante en Playa Blanca.
Entre los grupos, batucadas y comparsas participantes,destacaron la murga Los Gorfinijos, el grupo Timanfaya Lanzarote, Cumbancheros, Rayo de Luna, Bentchey, Chimbay, Sur Caliente y Villa Pipol. Esta última batucada subió al escenario en la plaza del pueblo para rematar la faena. Villa Pipol actuó ante miles de personas que en ningún momento dieron muestras de cansancio. Al contrario, tomaron un segundo aliento para bailar en la verbena amenizada por la orquesta Melao Boricua de Tenerife y Grupo Bomba de Fuerteventura. La fiesta se mantuvo hasta la madrugada.