El peluquero lanzaroteño Moad Kacha publicó hace algo más de una semana un vídeo a la red social TikTok donde le cortaba el pelo y le arreglaba la barba de forma gratuita a José, una persona sin hogar que vivía en la calle en Arrecife.
El vídeo, que se hizo viral con más de 65.000 reproducciones, tuvo el poder de cambiarle la vida a José. Un simple gesto altruista con el que el joven pretende ayudar a aquellas personas que lo necesitan.
Kacha, de 18 años y menor de cinco hermanos, trabaja en una peluquería en Arrecife desde los 17 años. "Mientras cursaba la ESO, me apunté a un curso de peluquería que terminé ese mismo año y empecé a trabajar en la peluquería de mi hermana", cuenta.
"Desde siempre me he fijado en el trabajo de mi hermana porque ella ha trabajado con artistas, cantantes y futbolistas y yo pensé: ¿por qué no puedo hacer algo igual?", continúa el joven.
Valores inculcados por sus padres
La necesidad de Moad por ayudar no es algo externo a su entorno ya que, según desvela, es algo que le han transmitido sus padres. "Me fijaba siempre en mis padres y en mi familia y en cómo ayudaban a la gente, es algo que desde pequeño me sorprendió", explica.
"Desde pequeño tuve esa valentía de ayudar a las personas, sea quien sea, y pensé en hacer algo diferente, ya que como soy barbero, aposté por salir a la calle y tener un gesto pequeño pero que puede cambiar a esa persona en un instante", indica.
Los padres de Kacha, de origen marroquí, siempre han ayudado a aquellas personas que lo necesitaban, como ofrecerle a una persona desconocida que vive en la calle a subir a su propia casa a comer. "Mis padres me dicen que para la edad que tengo soy una persona muy grande y con muchos valores", dice.
El poder de un gesto
Cuando Moad se topó con José tumbado en un pequeño portal de Arrecife, quiso ayudarlo sin dudarlo aunque al principio, el hombre dudó de si realmente querían ayudarlo o reírse de él. "De primeras lo notaba muy callado pero después se fue soltando y al acabar el corte lo vi con una sonrisa de oreja a oreja", recuerda el joven.
Y es que José había llegado desde Huelva, primero a Gran Canaria y después a Lanzarote en busca de trabajo, donde llevaba viviendo en la calle desde verano.
Gracias a la viralización del vídeo, pudo conseguir un puesto de trabajo en una empresa de construcción y según cuenta Moad, también un techo bajo el que vivir. "Me lo contó después de pasarse por la peluquería donde trabajo y me sentí muy bien", dice el barbero.
Comentarios y críticas
A raíz del vídeo, algunas personas comenzaron a dejar comentarios criticando su acto y calificándolo de "interesado" y de hacerlo por una razón de promoción y no como un gesto altruista. "Mejor le hubieras llevado comida, ropa o manta, no un corte de pelo y evitar que diga la peluquería donde trabajas", dice uno de los comentarios.
Sin embargo, Moad cuenta que "él mismo fue quien me preguntó dónde trabajaba y quiso decirlo porque le salió de su corazón". Además, la gran mayoría de los comentarios son mostrando su apoyo al barbero y felicitándolo por la buena acción.
"Si yo hiciera estos vídeos por publicidad o marketing los grabaría todos los fines de semana o casi cada día para subirlos, pero no es el caso, es un pequeño gesto que lo puede hacer cualquiera", manifiesta. "Esas personas que dejan comentarios negativos quizás podrían aportar más que yo en lugar de estar criticando", sentencia.
En cuanto al otro vídeo que el joven subió cortándole el pelo a otro hombre en 2023, señala que cuando acabó de grabar lo llevó a comer y después se pasaba a verlo cada dos semanas. "Se cortaba el pelo conmigo y me quería dar algo de dinero pero yo le decía que no", declara. Además, el hombre acudía a Kacha en ocasiones cuando necesitaba algo y él se lo ofrecía.