El agricultor Manuel Peláez ha iniciado una nueva protesta por el cierre de mercadillos en la isla, esta vez frente al Ayuntamiento de Arrecife, donde se ha encadenado. Además, en esta ocasión, este hombre ha decidido ponerse también en huelga de hambre.
"Aunque no todos los mercadillos están cerrados, porque el de Mancha Blanca está abierto, el de Arrecife y Teguise no y me parece una cosa absurda, porque si uno abre, el otro puede abrir también", ha señalado en declaraciones a La Voz este agricultor, que ya llevó a cabo una protesta similar en septiembre en el Cabildo.
Entonces, tras el repunte de contagios que hubo en agosto, las instituciones decidieron cerrar los mercadillos, al igual que han hecho ahora, a excepción del Ayuntamiento de Tinajo. Sin embargo, la normativa del Gobierno de Canarias con respecto al nivel 4 de alerta sanitaria en el que se encuentra la isla, no impide la celebración de los mismos, siempre que no se supere el 33% del aforo establecido.
"La ley dice que el aforo máximo tiene que ser del 33%, pero se puede abrir, lógicamente siempre con esas garantías de sanidad", sostiene Manuel Peláez, que se queja de que siempre se pegue el "cerrojazo" a "los más pequeñitos", mientras las grandes superficies y los centros comerciales siguen abiertos.
"Nosotros tratamos de dar lo mejor con nuestros productos de agricultura ecológica, por lo que habrá que hacer presión para que esto se ponga en valor y se termine con estas restricciones absurdas", ha señalado este agricultor que, aunque abandonará el Ayuntamiento esta noche por el toque de queda, afirma que volverá este jueves, para seguir con su protesta, con la que pretende que se reabran los mercadillos.
"Lo veo complicado porque he hablado con el concejal, que ha pasado por aquí, y ya me ha dicho que por el momento no piensan abrir, pero ya veremos", ha concluido.
