Fotos: Javier Fuentes
Los Príncipes de Asturias y su hija, la Infanta Leonor, aterrizaron este lunes, 26 de diciembre, sobre las 13:30 horas en el Aeropuerto de Lanzarote, isla en la que pasarán las vacaciones navideñas hasta el próximo 31 de diciembre.
Sorprendentemente, don Felipe, doña Leticia y la pequeña Leonor llegaron a Guacimeta a bordo de un vuelo regular de la compañía Spanair, cuya llegada estaba prevista a las 13:05 horas
El matrimonio y su primogénita pasarán estos días en la residencia real de La Mareta, en Costa Teguise, que ya acogió el pasado mes de agosto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su familia, y en noviembre a los propios Reyes de España durante la visita que realizaron a Lanzarote, Gran Canaria y Tenerife.
Llegada a La Mareta
La entrada a La Mareta se produjo pasadas las dos de la tarde, en concreto a las 14:04 horas. Don Felipe conducía un Audi A3 de color negro, y en los asientos traseros viajaban doña Letizia y la infanta Leonor.
Escoltados por diversos vehículos de la Guardia Civil y de la seguridad propia de la Casa Real, la lluvia cesó por unos instantes y los Príncipes saludaron escuetamente antes de entrar a cuantos curiosos se agolpaban a las puertas de la residencia real.
Durante el tránsito desde Guacimeta hasta Costa Teguise, pudo verse a una Infanta Leonor muy resguardada del frío, con copiosa ropa de abrigo de color blanco. Se trata del primer viaje que Los Príncipes realizan fuera de Madrid desde el nacimiento de su primogénita.
En el lugar aguardaba entre fuertes medidas de seguridad el personal de varios medios de comunicación y unas ochenta personas, en su mayoría turistas peninsulares y británicos, que tras más de una hora y media de espera en algunos casos, lograron llevarse un grato recuerdo y una bonito foto.
Entre los asistentes, Juan Perrish, un asturiano de 83 años que, luciendo con todo orgullo su txapela (boina vasca o asturiana), decidió presenciar la llegada de los Príncipes a La Mareta. "Conozco al Rey y a la Familia Real desde hace años, solemos coincidir en Purrua y en Ribadesella, donde nos vimos la última vez hace dos meses en la entrega de los premios, y quedé en verlos en la Isla, donde tengo a una de mis hijas", comentó.
Otro matrimonio y sus dos hijos, procedentes de Barcelona, no dudaron en saltarse la excursión del día al enterarse de la visita de los Príncipes. "Íbamos escuchando la radio del coche de alquiler, y en lugar de visitar Haría nos dirigimos hasta La Mareta. Aquí llevamos esperando desde las doce y media", explicaron.
Según fuentes gubernamentales, la visita Real a la Isla ha puesto en marcha un amplio dispositivo de seguridad que perdurará durante toda la estancia de los Príncipes en Lanzarote.
Aunque en principio estaba previsto que pasaran en Lanzarote la Nochevieja, fuentes gubernamentales no han confirmado tal extremo, asegurando que es muy posible que el regreso a Madrid se produzca durante la propia jornada del próximo sábado.
Los Príncipes tienen previsto realizar un posado oficial este martes sobre las diez de la mañana.
La casa real de La Mareta, cuyo diseño fue obra del artista lanzaroteño más universal, César Manrique, cuenta con todos los servicios necesarios para garantizar el pleno disfrute de quienes la ocupan.
Incluso la pequeña Leonor dispondrá de todas las facilidades para un bebé de su edad ya que, a pesar de la reciente reforma a la que fue sometida por la esposa de Zapatero, Sonsoles Espinosa, el inmueble conserva parte de las instalaciones y el mobiliario que ya fue utilizado por la primogénita de Doña Elena en la visita de Los Reyes en enero de 1999, cuando repentinamente falleció la madre de don Juan Carlos, doña María de las Mercedes.
Desde entonces el Príncipe don Felipe no ha vuelto a pisar la Isla, y lo hace ahora precisamente, cuando hacen seis años de la muerte de su abuela paterna. Pero también Lanzarote es un lugar que le trae buenos recuerdos, porque aquí tiene grandes amigos y es donde ha disfrutado de varias de sus pasiones, sobre todo de lso deportes náuticos y dl contacto directo y cercano con la naturaleza.
No está previsto que el tiempo mejore demasiado en la Isla, por lo que será complicado que los Príncipes de Asturias y su hija puedan disfrutar de algunos rayos de sol antes del regreso.
La primogénita de los Príncipes de Asturias, que será bautizada el próximo 14 de enero en el Palacio de La Zarzuela, con sus abuelos los Reyes como padrinos, nació en la madrugada del 31 de octubre, tres semanas antes de lo previsto, en la madrileña Clínica Rúber Internacional.
