El Consejo de Gobierno de Canarias ha decidido este jueves reducir el grado de alerta en Lanzarote, que volverá a nivel 1 después de casi seis meses.
Fue el pasado 7 de enero cuando la isla entró en nivel 2 y pocos días después subió a 3 y a continuación a 4, donde permaneció durante semanas, tras el repunte de casos vinculado a las Navidades. Después fue reduciendo el grado de alerta y el 11 de marzo bajó ya a nivel 2, pero desde entonces seguía estancada en esa fase, de la que ha conseguido salir ahora.
El otro cambio se ha acordado en Fuerteventura, que en este caso subirá de nivel 1 a nivel 2. La isla majorera lleva dos semanas sufriendo un repunte de casos y este jueves ha llegado ya a una incidencia acumulada a 7 días de 85,19 casos por cada 100.000 habitantes, entrando en riesgo alto en este indicador.
Por su parte, Tenerife continuará en nivel 3 y el resto de islas -Gran Canaria, La Gomera, El Hierro y La Palma- en nivel 1, al que ahora regesa también Lanzarote.
En el caso de Gran Canaria, el consejero de Sanidad, Blas Trujillo, ha subrayado que harán "un seguimiento muy estrecho", ya que en los últimos días también ha sufrido un repunte y este jueves ha sumado 82 casos. En esta isla, la incidencia acumulada a 7 días está en 32,26 casos por cada 100.000 habitantes, en riesgo medio. Así, aunque de momento continuará en nivel 1, el Gobierno no descarta tener que adoptar medidas si las cifras siguen en ascenso.
Además, también ha apuntado que ese mismo seguimiento se hará en Fuerteventura, que aunque sí ha subido un nivel, a alerta 2, podría requerir restricciones adicionales si no se controlan los contagios. La isla majorera llevaba ya desde la pasada semana con indicadores peores que Lanzarote y este jueves casi cuadruplica su cifra de incidencia acumulada a 7 días.
En cuanto a Tenerife, es la que sigue concentrando la mayor preocupación y continuará en nivel 3, aunque las restricciones van a rebajarse. De hecho, en restauración y hostelería tendrá en la práctica las mismas medidas del nivel 2, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias suspendiera el pasado martes de forma cautelar las restricciones adicionales, atendiendo un recurso del sector hostelero de esa isla. A raíz de ese auto, el Gobierno llegó a un acuerdo con el sector que ha sido también aprobado este jueves en el Consejo de Gobierno.
De esta forma, se ha acordado que se permitirá el uso de los interiores, con un aforo del 50% y un máximo de dos personas en barra y de cuatro personas en mesa, o seis si todas están vacunadas. En cuanto a las terrazas, el máximo será de seis comensales, igual que en nivel 2, y con un aforo del 75%. Además, también se retrasará a la medianoche el horario de cierre.