“No van a poder con nosotros". Ése es el mensaje que ha lanzado la enfermera lanzaroteña Begoña Hernández, tras relatar algunos episodios de amenazas que han sufrido los sanitarios en los últimos meses por parte de los 'antivacunas'.
En su caso, ha explicado que vivió una situación tensa en una jornada de vacunación sin cita en el Centro Comercial Deiland, el pasado mes de agosto. “Dos personas nos amenazaron y pretendían que recogiera unos informes que ellos me daban”, ha explicado. No obstante, asegura que hicieron "caso omiso" y continuaron realizando su trabajo. "Está claro que, si no llega a ser por la vacuna, imagínense lo que habría ocurrido”, defiende esta profesional.
Además, ha apuntado que sus compañeras enfermeras de Gran Canaria y Tenerife han sufrido también varios episodios de amenazas de grupos antivacunas, sobre todo en la vacuguagua que recorre las islas capitalinas.
"El estado de ánimo ya no es el mismo"
Begoña Hernández, que pertenece al Centro de Salud de Titerroy y que es vocal del Colegio de Enfermería de la isla, también ha hablado en Radio Lanzarote-Onda Cero de la situación que siguen viviendo los sanitarios con la pandemia. “Llevamos un cansancio mantenido en el tiempo, y el estado de ánimo no es el mismo”, afirma, señalando que su el día a día está "en torno al Covid".
“Es un monopolio tan grande, que todas nuestras funciones, todo lo que hacíamos antes y que poco a poco vamos recuperando, fluye alrededor del Covid”, explica. No obstante, asegura que pese a la pandemia, no han dejado de realizar el trabajo ajeno al virus, como la realización de analíticas, charlas de educación sanitaria en centros escolares o las curas a domicilio.
Hernández espera que a medida que vaya avanzando el año 2022, se vaya recuperando "poco a poco" la vida que teníamos antes de la pandemia. “Tenemos que normalizarlo”, ha señalado, aunque reconoce que no le gusta el término de “gripalizar” la Covid, ya que produce un mayor número de muertes y de complicaciones que la gripe común.