Los trabajadores y trabajadoras de la Sociedad Democracia de Arrecife han enviado este miércoles un comunicado saliendo al paso de las acusaciones del presidente Lorenzo Lemaur Santana, quien acusó a los empleados de dañar a la sociedad y a sus socios.
Los empleados han denunciado que no han cobrado las mensualidades de enero y febrero, siendo "dos meses consecutivos sin cobrar" y que no saben si lo harán "mientras esté el actual presidente".
En el citado documento dirigido a los socios, han resaltado que es "un orgullo pertenecer a esta sociedad y trabajar en ella". Así pues, han insistido en que la plantilla "respeta como cualquier otro socio", pero que además es "el sustento" de sus familias.
La plantilla ha denunciado "varias irregularidades" en la Sociedad Democracia, desde la llegada de Lorenzo Lemaur como presidente. Entre ellas, el impago de las nóminas en su primer mes de mandato y han indicado que "aún no han recibido los atrasos pertenecientes a esa fecha".
Además, han acusado a Lemaur de llevar a cabo "actos autoritarios" hacia el personal administrativo, haciéndoles sentir "incómodos en su puesto de trabajo". Las bajas médicas de diferentes trabajadores en los últimos meses se han sumado a las renuncias de otros y ha llevado a "no contar con administración interna".
El citado comunicado ha resaltado que, "en este momento, la situación es insostenible" y que "gran parte de la plantilla" está de baja laboral por diferentes problemas, entre ellos, los ataques de ansiedad.
En este sentido, han añadido que "trabajar con el actual presidente se ha convertido en algo insoportable" y ha dañado la salud de los trabajadores.
Los empleados han pedido a los socios que "esta situación cambie a la mayor brevedad posible" y que su puesto de trabajo "vuelva a ser un sitio apto para poder hacer nuestra labor" por ellos mismos, sus familias y la propia Sociedad Democracia antes de que sea tarde.
La situación de la cafetería
En el documento dirigido a los socios han indicado que desde la presidencia se les "ha pedido y exigido en varias ocasiones desbloquear la cafetería de la Sociedad Democracia", pero los trabajadores se han negado porque se encuentra denunciada.
"Nadie puede tocar el material que está dentro, ya que no pertenece a la sociedad y estaríamos haciendo algo, a nuestro entender, ilegal", han insistido. A raíz de esta negativa, los trabajadores han acusado a Lorenzo Lemaur de enviar un burofax a las viviendas de cuatro empleados notificándoles la apertura de "partes graves" y advirtiendo de que una segunda negativa supondría "una falta muy grave", donde correría peligro su pusto de trabajo.
Los trabajadores han asegurado que a pesar de la denuncia y las órdenes del presidente exigiendo prioridad "máxima y urgente al desbloqueo del establecimiento", este requerimiento "pasa los límites legales".