La Unión General de Trabajadores (UGT) sorprendió a propios y extraños al hacer público un comunicado por el que se daba por desvinculada por la huelga de trabajadores del handling de Iberia. "Ante la gravedad de los hechos ocurridos en la asamblea del 22 de junio al no permitir la mayoría del comité de empresa el voto de los trabajadores asistentes para saber si estaban a favor o no de la huelga convocada para el próximo día 26, y no considerando justa dicha situación, UGT se desvincula de la huelga indefinida convocada por el comité del centro, hasta que no se someta a votación libre y secreta ante la asamblea de trabajadores la decisión de apoyar o no la protesta". Con estas palabras explicaba el sindicato su salida de la huelga, lo cual deja en una situación cuanto menos comprometida al resto de los convocantes, sobre todo teniendo en cuenta el comunicado de AETUR criticando la estrategia sindical de los trabajadores del aeropuerto.
José Torres Fuentes, vicepresidente de AETUR, comentó en Radio Lanzarote que "las huelgas en el aeropuerto de Isla ya se han convertido en algo habitual", porque se convocan al menos cada dos meses, lo que tiene indignado y hastiado al empresariado turístico de la Isla, tal y como se declara en un comunicado de la Federación de emprendedores publicado por este diario. "Todos entendemos que los derechos del trabajador se tienen que respetar, pero lo que está claro es que no se puede siempre cerrar las puertas de entrada a una Isla". La medida de los sindicatos integrados en Iberia sorprende aún más al tener en cuenta que tratandose de un conflicto en el ámbito regional, sea el aeropuerto de Guacimeta el único de todo el Archipiélago que se pone en huelga, cuando los mayores afectados por la reestructuración de Binter son los trabajadores de Tenerife y Gran Canaria.
En este sentido, la Federación solicita a Binter que "no realice los vuelos con Lanzarote hasta que no tenga las garantías de normal funcionamiento y asistencia de sus pasajeros". La finalidad de esto sería no sólo ejercer presión sobre los sindicatos para que adopten formas distintas para llevar a cabo sus protestas, sino evitar que los pasajeros sufran las consecuencias de la huelga de personal de asistencia en tierra, lo que supondría horas de retraso en la entrega de las maletas, además de graves carencias en el resto de servicios que ofrecen los trabajadores del handling de Guacimeta.
