Las candidatas de Sumar por la provincia de Las Palmas al Congreso y el Senado para las próximas elecciones del 23 de julio han apostado este lunes, en Lanzarote, por una cultura libre de cancelaciones y censuras, como las que ha impuesto Vox en en algunas instituciones donde están gobernando, en las que, por ejemplo, se ha prohibido representar ‘Orlando’, de Virginia Woolf, porque su personaje principal realiza una transición de género.
Para Noemí Santana, cabeza de lista al Congreso, “existe una necesidad urgente de proteger nuestro patrimonio, tanto natural como cultural, que se ha visto en riesgo real, con la llegada de los gobiernos de Vox, de la mano del PP. Está claro que, cuando toman el poder, quien marca la pauta es la ultraderecha, que se esfuerza en poner veto a la creatividad”. En este sentido, la candidata señaló la importancia y la contribución a la libertad artística de exponentes tan fundamentales para Lanzarote y el mundo como son César Manrique y José Saramago.
Nona Perera, candidata de Sumar al Senado por Lanzarote, considera que “si se piensa un poco, se comprueba que es muy difícil separar la cultura del patrimonio, sobre todo cuando la cultura sufre algún ataque, como ha pasado recientemente, pues eso significa que el patrimonio de un pueblo se ve diezmado”, señaló. “A lo largo de la humanidad ha habido varios intentos de censurar la creatividad y marcar líneas políticas con una cosa que tiene que ser la expresión de la libertad de un pueblo”, agregó. “Lanzarote tiene unas líneas básicas sobre patrimonio y cultura que pertenecen a la ciudadanía. Tenemos que potenciar y cuidar este tesoro, concluyó.
Las candidatas, junto a la también candidata al Congreso, Getsemaní de San Marcos, informaron a la ciudadanía de las propuestas de Sumar, en un paseo por Playa Honda, y después participarán en el acto organizado por A Casa de Saramago, en Tías, donde, junto a organizaciones feministas y LGTBIQ+, y activistas como María González, leerán fragmentos de la obra censurada ‘Orlando’, para reivindicar la libertad cultural y dar su apoyo incondicional al colectivo, que ve peligrar sus derechos conquistados por la ola reaccionaria que se extendió por ayuntamientos y comunidades las pasadas elecciones autonómicas.