Izquierda Unida Canaria, en coalición con Sumar, ha lanzado una propuesta en el marco de la campaña a las elecciones europeas para abordar la creciente preocupación sobre la accesibilidad a la vivienda en Canarias, planteando un debate en el Parlamento Europeo para evaluar la viabilidad de limitar la compra de viviendas por parte de extranjeros. Esta iniciativa surge en respuesta a las dificultades que enfrenta el pueblo canario para acceder a la vivienda debido al aumento de precios impulsado por la demanda extranjera.
Manu Pineda, candidato de Izquierda Unida en la lista de Sumar para las elecciones europeas, y Luisa Tamayo, Coordinadora Nacional de IUC, han subrayado la necesidad urgente de discutir y explorar soluciones legislativas que permitan a las regiones insulares y ultraperiféricas como Canarias proteger a sus comunidades locales de los impactos negativos del mercado inmobiliario globalizado.
"La situación en Canarias es crítica; los precios de la vivienda se han disparado, poniendo la propiedad fuera del alcance de muchos canarios. Esto no solo es un problema económico, sino también social y cultural", afirmó Pineda. "Nuestra propuesta busca abrir un diálogo en Bruselas para considerar excepciones regionales dentro del marco legal europeo, similar a lo que se ha permitido en Malta antes de su ingreso a la UE".
La problemática en Canarias no es única, ya que otras regiones costeras y turísticas de Europa comparten desafíos similares, pero las islas se enfrentan al doble castigo, al suponer que un bien esencial como la vivienda no sólo no está al alcance de la comunidad local, sino que en muchos casos se va a manos foráneas con el fin de seguir impulsando la especulación.
Luisa Tamayo destacó la importancia de esta iniciativa: "Es vital que protejamos el derecho a la vivienda de los canarios y canarias y garantizamos que las generaciones futuras puedan acceder a ella. La especulación inmobiliaria, alimentada por compradores extranjeros, está distorsionando nuestro mercado y expulsando a los residentes locales de varias zonas de las islas. Necesitamos encontrar un equilibrio entre ser una región acogedora y preservar nuestros recursos para quienes llaman a Canarias su hogar".
Aunque la legislación actual de la UE establece un mercado común libre, hay precedentes de restricciones en casos excepcionales que protegen intereses nacionales críticos. "Estamos investigando todas las opciones legales y trabajando para que la Unión Europea reconozca la singularidad de Canarias como una región ultraperiférica con desafíos únicos", agregó Tamayo.
"Este es un momento vital para la política de vivienda en Canarias y Europa. Con el apoyo del Parlamento Europeo, podemos desarrollar un marco que respete las particularidades de regiones como Canarias, mientras se adhiere a los principios de libre mercado y movilidad que define la UE", concluyó Pineda.