El alcalde de Yaiza y también consejero del Cabido de Lanzarote, Óscar Noda, ha intervenido en la mañana de este miércoles en la cadena radiofónica Radio Lanzarote-Onda Cero para explicar las peticiones que el Consorcio del Agua de Lanzarote, presidido por Oswaldo Betancort, ha hecho a los diferentes municipios de la isla después de que declarara la emergencia hídrica en Lanzarote.
El consejero por Unidos por Yaiza-Nueva Canarias en el Cabildo insular ha explicado que desde el Consorcio se ha pedido a los consistorios que eviten regar los jardines, limpiar los contenedores o baldear "ciertas zonas" del municipio. Noda ha informado en el matinal Buenos días, Lanzarote que durante una reunión celebrada en el presente mes de febrero se le entregó a los representantes municipales "un borrador de bando" en el que se recogían estas acciones. Además, de pedir a particulares que evitaran llenar las piscinas e incluso contemplaba que los policías pudieran hacer inspecciones para ver si se cumplen o no estas medidas.
"El ciclo integral del agua está como está", ha señalado el mandatario sureño durante su intervención. "A veces nos centramos más en la producción y el abasto, que es importante, pero también hay que ver dónde van esas aguas. Por ahora no tenemos aguas agrícolas, ahora poco más que con esta emergencia hídrica, sacada de la manga, no podemos regar los jardines", ha continuado.
Noda ha adelantado que "muchos" de los representantes insulares presentes en la reunión no estaban de acuerdo con las medidas propuestas. "Se mandó un borrador de bando, cuando hay que aplicar cosas malas lo cargan los ayuntamientos, pero otras veces se mandan misivas del Cabildo, aunque estamos consorciados y para estos casos, no", ha recriminado al grupo de gobierno insular, conformado por Coalición Canaria y el Partido Popular.
El responsable sureño se ha mostrado conforme con retirar los lavapies del municipio y ha añadido que solo tienen uno en la conocida como playa de El Pueblo. Sin embargo, se ha negado a no limpiar los contenedores, ni baldear ciertas zonas por el riesgo sanitario que podría suponer. "Reducir la frecuencia, puede, habría que ver, pero lo sanitario es lo primero", ha añadido.
Sobre la posibilidad de dejar de regar los jardines, Noda ha indicado que esta opción contradice a los expertos, que defienden que hay que el palmeral debe ser regado. Al mismo tiempo, ha pedido al Gobierno insular que "es hora de que se empiece a actuar ya que tiene esos siete millones gracias a esa emergencia hídrica improvisada y sacada de la manga".
"Muchas veces no se hace una medición real, sino se hacen estimaciones y ahí se empieza a mandarle para arriba, hablando claro", ha añadido, sobre si el Cabildo había hecho algún estudio para determinar el impacto que tendrían esas medidas, si se aprobasen.
Por su parte, el representante sureño ha puesto la esperanza en conseguir agua regenerada para poder mantener los riegos de los jardines al día.