El titular del Gobierno canario, Fernando Clavijo, ha admitido este lunes que "habrá más carpas" en puertos canarios para dar una primera atención a migrantes, como la que ha instalado la administración que dirige en Lanzarote, si no hay respuestas del Gobierno de España.
Clavijo ha considerado que este tipo de infraestructuras "son la representación de un fracaso de política migratoria" y reflejan la "incapacidad" para atender y derivar de manera digna a los cientos de personas que llegan a diario a las islas a bordo de embarcaciones precarias.
"Si no hay respuestas va a haber más carpas, no hay más remedio, y benditas carpas. La oposición me criticó cuando se puso la de Lanzarote y, sin embargo, es el Estado quien me la pidió para poder atender a las personas que llegaron el fin de semana pasado", ha aseverado.
Sin embargo, inicialmente el Ejecutivo canario había anunciado la instalación de estas carpas para acoger a menores migrantes, una decisión cuestionada por la Fiscalía al verse vulnerados los derechos de los menores que llegan a las islas en embarcaciones precarias.
Clavijo ha insistido en que "lo ideal es que no haya carpas y que tengamos un sistema que les pueda atender", si bien ha asegurado que "no lo estamos teniendo porque el Gobierno de España no ha puesto ni los recursos ni la atención ni la voluntad política" para ello.
Durante su intervención en el encuentro informativo organizado por los diarios canarios del grupo Prensa Ibérica, en el que ha contestado preguntas formuladas por periodistas de las cabeceras locales y de otras comunidades autónomas, Fernando Clavijo ha defendido el "modo canario" de hacer política frente a la polarización que impera en el territorio peninsular, sobre todo en el Congreso y el Senado.
Por eso, ha estimado que "romper relaciones" en una negociación que trata de establecer un mecanismo obligatorio para la derivación de menores migrantes no acompañados entre todas las comunidades autónomas, a través de la modificación de la Ley de Extranjería, "no sirve para el día después", ya que este fenómeno no cesa y hay que seguir gestionando.
"El día que tenga ganas de ruptura me voy para mi casa, las rupturas hacen que los problemas se enquisten", ha referido en relación a la actuación del PP en este asunto.
El presidente canario ha asegurado que antepone la lealtad institucional a las diferencias que la administración que dirige mantiene con la estatal en diversos asuntos, como el migratorio, y ha defendido la necesidad de "llegar a la conferencia de presidentes con una propuesta" que contribuya a paliar el impacto que este fenómeno causa en los servicios sociales del archipiélago.
A su juicio, la posible visita del papa Francisco a las islas, sobre la que estima que "hay señales", como la reciente recepción que el pontífice brindó al presidente español, Pedro Sánchez, "puede acelerar que se alcancen acuerdos políticos" dirigidos a la modificación legal por la que clama esta región.
Para Clavijo, "la UE no ha fallado a Canarias" a la hora de ayudar a gestionar su emergencia humanitaria por la continua llegada de personas a bordo de cayucos, neumáticas y pateras. Sí lo ha hecho, ha dicho, "el Gobierno de España y toda la clase política".
"La ayuda que ha venido de Europa, España la ha usado para atender a los migrantes adultos, no a los menores. No podemos escudarnos en una Ley del Menor de 2000 y decir que las competencias son de las comunidades autónomas, ¿y si llegan 300.000?" niños, se ha preguntado para afirmar que las competencias sobre "extranjería, fronteras y concurrencia" son del Estado.
El presidente canario ha afirmado que "los menores llegan a Canarias" porque el Gobierno de España "no ejerce su obligación constitucional de controlar las fronteras" y ha advertido de que la administración que dirige seguirá buscando acuerdos con Marruecos y otras comunidades españolas para garantizar que a los menores migrantes se les da una atención digna, que no solo pasa por albergarlos en centros, sino por integrarlos, darles un idioma, escolarizarlos y ofrecerles un proyecto de vida.
Ahora mismo eso no se puede dar y en Canarias hay más de 2.000 menores extranjeros no acompañados sin escolarizar por diversos problemas, entre ellos los obstáculos que existen para empadronarlos, ha aseverado.