Lo que ocurre con el agua residual una vez apretamos el botón de la taza del váter se convierte en un hándicap para la preservación y el cuidado medioambiental. La situación se agrava más al tratarse de territorios insulares con una extensión determinada y que ven cómo sus litorales se van viendo afectados por los vertidos hacia el mar.
Lanzarote, una isla con 163.543 habitantes y tres millones de turistas al año, cuenta con 44 puntos de vertidos de aguas residuales desde tierra al mar, de acuerdo con el censo elaborado por Servicios Omicron SA a petición de la Consejería de Transición Ecológica y Energía del Gobierno de Canarias.
De ellos, tres cuartas partes (un 75%) son irregulares y en un 65,9% de los casos funcionan de aliviaderos cuando las redes de saneamiento lo necesitan. Así pues, por su naturaleza, más de la mitad de estos vertidos son urbanos (un 63,6%), que se concentran en Tías (12 puntos), Arrecife (siete), Teguise (seis), San Bartolomé (dos) y Yaiza (uno). Cabe destacar que el censo no registra puntos de vertidos urbanos en Tinajo ni Haría.
En esta línea, los derramamientos de salmuera, producida por la desalinización del agua y el desecho del excedente al mar, están presentes en cinco lugares de la isla. En particular, se concentran en Arrecife (dos), Yaiza (dos) y Tías (uno).
Los vertidos inventariados industriales están en cuatro puntos de la capital conejera. Así pues, la categoría de otros registra los efluentes mixtos, donde se combinan los vertidos urbanos e industriales y los domésticos.
Cómo se eliminan los vertidos
De los diferentes sistemas de vertidos, destaca la conducción de desagüe, que es empleada en un 88,6% de los casos y en hasta 39 puntos de la isla. Entre ellos, la mayoría están localizados en Tías (14), Arrecife (14) y Teguise (siete), mientras que el resto está en San Bartolomé (dos) y Yaiza (dos).
De estas conducciones, el 25% son submarinas. En concreto, este desglose destaca los vertidos en Costa Teguise, donde el 71,4% de las conducciones de desagüe acaban en el mar.
Por su parte, el Inventario de Vertidos de Lanzarote registran cuatro emisarios sumarinos o tubos que conducen el agua de las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales hasta el mar. En este caso, se trata de cuatro puntos repartidos en Arrecife (dos), Tías (uno) y Yaiza (uno). Mientras que de acuerdo con este informe, los pozos solo suponen uno de los vertidos insulares en Yaiza.
Las aguas fecales de la población y el turismo
Los núcleos poblacionales de Arrecife y Tías, donde se concentran "los mayores valores" de habitantes también sufren una mayor presencia de vertidos de aguas residuales. Al tiempo en que, los vertidos de aguas fecales en Yaiza y Teguise, proceden de los núcleos turísticos de Costa Teguise y Playa Blanca.
Arrecife concentra la única zona industrial de Lanzarote donde "se generan vertidos directos al mar". En concreto, la Central de Unelco genera un vertido con un caudal "bastante abundante" y la desaladora de Punta de los Vientos de Inalsa emite salmuera "directamente sobre la zona intermareal".
Las aguas de la red de saneamiento de Arrecife son dirigidas por las sucesivas estaciones de bombeo hasta la EBAR Portugal. Mientras que en Playa Honda dispone de una red de saneamiento con dos estaciones de bombeo que impulsa las aguas hasta la EBAR y luego hasta la EDAR de Arrecife.
El Inventario de Vertidos de Lanzarote muestra que existe "una concentración de los vertidos de tipo urbano en grandes corrientes de evacuación". Mientras que resalta que el agua residual que se vierte en los emisarios de Puerto Naos, Puerto del Carmen y Costa Papagayo "no pueden tratar de forma efectiva todo el caudal que reciben" porque las plantas que depuran ese agua antes de tirarla al mar están "infradimensionadas".
Desalinización del agua
La falta de agua en la isla ha supuesto el auge de la desalación de agua procedente del mar. El citado informe resalta que existe "un número elevado" de plantas desaladoras públicas y privadas en Lanzarote.
En este caso, resalta que las pequeñas desaladoras suelen ubicarse en hoteles y complejos turísticos que destinan el agua a su propio abastecimiento. En esta línea, la investigación concluye que se debe "limitar el número de vertidos inventariados tipo salmuera, debido a que la mayor parte de las descargas de las plantas pequeñas suelen realizarse directamente al subsuelo".
Mientras que sobre los centros de producción de agua desalada para uso público, la investigación resalta la producción localizada en Punta de los Vientos de Arrecife, el más potente de la isla con capacidad para 45.000 metros cúbicos y el centro de Janubio en Yaiza, con una producción diaria de 4.800 metros cúbicos.
Saneamiento y depuración
Sobre el saneamiento, la mayor parte de los núcleos urbanos de Lanzarote ya cuentan con una red de saneamiento. Entre ellos, Arrecife, el casco de San Bartolomé, Playa Honda, Tías y Puerto del Carmen, Puerto Calero, Playa Blanca, La Santa Sport, Caleta de Famara, Famara, el casco de Haría, Máguez o Costa Teguise ya recogen sus aguas residuales y las envían a estaciones depuradoras. Sin embargo, el resto se eliminan a través de fosa séptica con pozo filtrante o, en su mayoría, con pozo negro.
Así pues, el informe revela que la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Tías presenta "mayores problemas de infradimensionamiento" porque aunque tiene capacidad para 3.000 metros cúbicos de agua residuales al día, recibe cerca de 6.000. Por este motivo, "en gran parte han de ser derivados directamente al emisario submarino de Puerto del Carmen sin someterse a tratamiento adecuado".
Para solventar esta situación, está en marcha la ampliación de esta depuradora, así como de las de Arrecife y Haría y la construcción de una nueva planta en Playa Blanca.
Frente a estos vertidos, está la reutilización de las aguas una vez depuradas. En el caso de Costa Teguise, por ejemplo, se reutiliza toda el agua que es depurada. Mientras que en Tías, Arrecife y Playa Blanca también se hace uso de este agua para regar las zonas verdes.
La Graciosa y el Archipiélago Chinijo
La planta de destilación que se encuentra en La Graciosa y con capacidad para 75 metros cúbicos al día está parada desde hace cinco años. Lo mismo ocurre con la Planta Lanzarote II ubicada en la Punta de los Vientos. Ninguna ha sido considerada para este inventario.