Las claves del Colegio Guenia: fomentar las habilidades sociales, grupos reducidos e inclusión

Perder el miedo escénico, enfrentarse a la frustración y practicar la empatía, son algunas de las enseñanzas que el centro escolar impulsa con los alumnos cada día

Eider Pascual

Periodista

21 de abril de 2024 (11:05 CET)
Actualizado el 22 de abril de 2024 (18:04 CET)
Aulas de Infantil en el Colegio Gueina (Foto: Juan Mateos)
Aulas de Infantil en el Colegio Gueina (Foto: Juan Mateos)

El Colegio Guenia, situado en Guatiza, tiene clara su forma de enseñanza para atender de manera individualizada a cada alumno que acude al centro escolar. Dispone de grupos reducidos en Infantil y Primaria, concretamente de entre 10 y 15 niños, con el objetivo de ofrecer un servicio extenso a cada uno de ellos e impulsar su personalidad y cualidades. "Estamos contentos con la atención que les damos, también las familias se alegran de la atención personalizada que le damos a sus hijos", han comentado las profesoras del colegio.

El pequeño censo de la localidad, lo que podría ser un handicap para el Colegio Guenia, se ha convertido en algo positivo y h ampliado su visión para aportar a los alumnos más atención en su día a día. "Cada curso nos cuesta más conseguir niños para matricularse", ha desvelado su directora, Elisa Brito Guillén. Una desventaja con la que aprovechan para atraer alumnado de zonas cercanas al centro. "El 20% del alumnado viene de Costa Teguise y Los Cocoteros", ha comentado ella. 

Los niños van cambiando de aula dependiendo de la clase que les toque recibir. Para motivar y no causar monotonía en ellos, suelen tener algunas asignaturas en distintas aulas, como por ejemplo la clase de inglés. Además, con esa atención individualizada, que les permite adquirir los conocimientos de forma más integradora, reciben una enseñanza adecuada a sus necesidades, fortalezas y debilidades. "La atención es más individualizada, por lo que, creemos que hemos convertido el estar mezclados en algo nada negativo", ha puntualizado la actual directora del centro, "cuando se mezclan más alumnos, ya se vuelve más complicado"

Desde que comenzó el curso, los alumnos de Infantil, concretamente de 4 años, han realizado diversos proyectos (conjuntamente con todo el ciclo de Infantil) como el dedicado a conocer la historia de Lanzarote y César Manrique, con el proyecto de 'Lanzarote y los Volcanes'. Una iniciativa escolar que será presentada a los familiares tras su finalización. Con ella trabajan el "miedo escénico y expresión lingüística", ha subrayado Saray Fraiz, una de las profesoras del centro. "Estos proyectos les motivan para aprender de otras asignaturas como matemáticas, lengua, etc.", ha recalcado. 

Lo más importante para el profesorado es que los niños vayan perdiendo el miedo a hablar en público y desarrollen habilidades sociales que puedan ayudarles en su vida adulta. Para ello, las actividades en las que se exponen ante sus compañeros son vitales para ir practicándolo poco a poco. "Tenemos un micrófono y les ayudamos a ser protagonistas, a perder el miedo escénico", ha asegurado la profesora Saray. Una forma de que los alumnos entablen relaciones personales y aprendan a comunicarse entre ellos y con los demás de manera efectiva. Las tareas con las que se familiarizan diariamente, les llevan a tener una enseñanza conjunta y a saber identificar las emociones de sus compañeros. "Entre ellos se ayudan un montón, aprenden conjuntamente mediante una asamblea, que sirve para buscar soluciones y ponerlas en práctica", ha señalado la docente. 

"Entre ellos se ayudan un montón, aprenden conjuntamente y buscan soluciones"

Además, mediante la enseñanza a expresar sus emociones, el centro escolar logra que los pequeños puedan manifestar, gestionar y conocer sus sentimientos y entender las preocupaciones de los demás compañeros, para ponerse en su lugar y tratar la empatía desde una edad temprana. Cada alumno dispone de unas etiquetas con cada emoción (tristeza, alegría, enfado, miedo...), acompañadas de unas pinzas con su nombre, las que utilizan para conocerse mejor a ellos mismos y a todo su alrededor. "Cada uno se posiciona en un sentimiento y van comentando lo que les ocurre", ha señalado Fraiz. 

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Iniciativa de expresar el estado de ánimo (Foto: Juan Mateos)
 

En el momento en el que algunos de los niños actúan de una "manera incorrecta", los demás saben identificar los errores y apoyan individualmente al otro para mejorar su forma de pensar y cambiar el comportamiento que lleva a esas "malas maneras". "El otro día, un niño entró en rabieta y sus compañeros le dieron técnicas para relajarse", ha desvelado. Un aprendizaje "muy necesario" para introducir a los pequeños en el manejo de "gestión de frustración", ha remarcado Saray. "Van utilizando las técnicas que aprenden en el colegio y las trasladan también a casa", un entorno fundamental para ir adquiriendo valores.

Concienciados con el colectivo LGTBIQ+ y la diversidad

Un centro escolar dedicado a la integración e inclusión de todos los alumnos que deciden matricularse, poniendo el foco en la atención a la diversidad. Un colegio concienciado con el cuidadado de los alumnos con necesidades especiales como puede ser el Trastorno Espectro Autista (TEA), también con la integración de la mujer y el colectivo LGTBIQ+ ("Espacio Seguro"), mientras aportan actividades con el objetivo de hacer participe de ellas a todos los integrantes de Infantil y Primaria. "Siempre se plantean iniciativas desde el Área de Igualdad, como en el Día de la Mujer", ha revelado su directora. El pasado 8 de marzo, el Día Internacional de La Mujer, los jóvenes, acompañados de los profesores, "se lanzaron a hacer entrevistas a las mujeres trabajadoras de su entorno", han comentado. 

 "Por el Día de la Mujer se lanzaron a hacer entrevistas a las mujeres trabajadoras de su entorno"

Desde el Colegio Guenia demandan "mucha más financiación pública" para los programas de atención a la diversidad. Es una maestra especializada la que se encarga de ofrecer esos programas en "todas las aulas adaptadas", pero aún así "reclamamos más atención", han subrayado desde dirección. Desean recalcar que ha "aumentado" la demanda de atención a niños con necesidades especiales.

El uso de Pictogramas en las aulas de Infantil empuja a los alumnos a establecer un calendario y horario de tareas, con el que no perder la organización y conocer las materias y profesores con los que trabajaran durante su horario lectivo. Sobre todo, los alumnos con TEA "ven necesario" tener un plan escolar en cada aula para "saber qué se va a hacer a lo largo de todo el día", han reconocido desde el centro. Una iniciativa con la que se forman todos los alumnos, independientemente de las necesidades personales que tengan. 

El impulso y utilización de las tecnologías es destacable en sus aulas. Cuentan con un Aula Croma para presentar todos los proyectos y los aparatos electrónicos como tablets y móviles, aunque se utilizan en como recurso secundario, les aporta la familiarización con los actuales y modernos recursos que serán vitales para su futuro. A pesar de ello, los alumnos "siguen teniendo sus propios libros de texto", ha recalcado Elisa. 

Una pantalla interactiva que se ilumina impulsa su creactividad y fomenta sus ganas de interesarse por asignaturas como las matemáticas. "Con ella aprenden figuras geométricas, los números y las letras, entre otras", ha recalcado la profesora de Infantil. Una manera de mantener la atención de los alumnos, buscar una alternativa a los teléfonos móviles y convertir el temario en un atractivo programa para ellos. 

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Pantalla interactiva para aprender números, letras, etc. (Foto:Juan Mateos)
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