La carpa municipal de Teguise fue el escenario elegido por la Concejalía de Festejos, tutelada por el edil Francisco Javier Díaz, para celebrar en esta edición un acto programado con motivo del Carnaval Tradicional. El frío viento y alguna que otra gota de agua fue el motivo de la nueva ubicación para que el público asistente pudiera disfrutar de una noche muy esperada por los vecinos de Teguise y muchos visitantes llegados de otros puntos de la isla.
Las amplias instalaciones de la carpa se inundaron con la presencia de los colectivos invitados poniendo el colorido y el ritmo con las canciones propias, que antaño se escuchaban en los bailes tradicionales en las sociedades de Lanzarote.
Sin lugar a dudas, la aparición en escena de Los Diabletes levantó mucha expectación, sobre todo a los más pequeños, que atemorizados cuando se les acercaban buscaban refugio en sus padres. Su vestimenta pintada con rombos, el sonar de las esquilas y sobre todo las caretas, fue motivo para que se disparar los flases de los móviles para inmortalizar el momento.
Otro de los atractivos de la noche lo protagonizaron los famosos Toros de Tao, haciendo un amplio recorrido por toda la vista y con sus prolongados cuernos envistiendo algún que otro atrevido que le desafiaba. Además, las mascaritas tradicionales Revestidas fueron las encargadas de plasmar cómo los habitantes de Lanzarote se las ingeniaban para disfrutar de unos días de carnaval rebuscando en los viejos baúles algún que otro traje, pantalón o camisa para salir a correr el carnaval por las calles del pueblo y luego por la noche acudir a la sociedad para bailar y disfrutar gastando alguna que otra broma al pretendiente o a la novia.
En la carpa no faltó la buena música amenizada por las parrandas El Golpito y Son del Norte, contagiando al público asistente a dejar sus asientos para marcarse unos bailoteos como marca la tradición.
