Los vecinos del barrio marinero de Valterra celebraron este martes el día de su patrona Nuestra Señora del Carmen con las primeras luces del alba, a las 07.00 horas de la mañana con la Salve Marinera y Rosario de la Aurora por las calles del barrio y finalizando con el tradicional desayuno con churros y chocolate. Una festividad que continuó por la tarde a las 19.00 horas y participar de la eucaristía en el iglesia parroquial.
La eucaristía estaba presidida por Jesús María Silva Castignani, párroco de San Isidro y San Pedro Claver en Madrid, que estuvo asistido por el Nicanor Bermúdez, el párroco titular de Valterra y el párroco de Tías, Adrián Sosa. Los cantos estuvieron amenizados por mujeres y hombres colabores de la parroquia y acompañados al piano por el profesor Pepe Artiles.
Esta celebración tuvo cierto matiz nostálgico con sabor agridulce, en el momento en el que el párroco titular Nicanor Bermúdez anunciaba su despedida después de 6 años al frente de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen y su próximo traslado a Las Palmas de Gran Canaria. Al terminar con sus agradecimientos a toda la comunidad, durante varios minutos sonaron los aplausos animándole y arropándole en unos momentos para el muy emotivos.
Al finalizar la eucaristía la soprano Sheila Rizo interpretó el Ave María de Schubert, a continuación, se procedió a la procesión encabezada por la banda de música La Unión Musical de Lanzarote, dirigida por el profesor Pepe Artiles, con los sacerdotes celebrantes, autoridades municipales y numerosos feligreses que acompañaron a la Virgen durante todo el recorrido procesional. Un recorrido que este año bordeó la ribera del Charco de San Ginés, para llegar junto a la sede de la Asociación Cultural Casa del Miedo la junta directiva y colaboradores habían levantado un pequeño altar con una replica de la Virgen del Carmen.
El vicepresidente Pedro Cabrera recitó una poesía, un regalo de Juan Rojas Bolaños, y para cumplir con la tradición le esperaban los componentes de la murga Los Simplones que con mucha emoción y cariño le cantaron una bonita plegaria titulada Madre Carmen. Acto seguido, todos los presentes disfrutaron de los fuegos artificiales poniendo así el broche a una jornada dedicada a la Patrona de los Marineros y de Valterra.