La noche del pasado viernes, la familia de la Agrupación Folclórica Rubicón de Yaiza celebró su festival con motivo de las fiestas en honor a Nuestra Señora de Los Remedios. El evento tuvo lugar en la plaza de Los Remedios, que se llenó por completo con un público amante de las tradiciones canarias, manifestadas a través de cantos y bailes tradicionales.
Desde sus inicios, la Agrupación Folclórica Rubicón ha diseñado un formato dinámico y novedoso para su festival anual, logrando mantener al público atento a cada movimiento de sus 49 componentes, divididos en los cuerpos de toque y baile. En esta edición, la base musical fue interpretada en su totalidad por el cuerpo de toque, dirigido por el profesor Roberto Gil. En cuanto al baile, destacó la integración de numerosos jóvenes, lo que ha permitido una amplia plantilla y el relevo de los componentes en cada pieza programada. El cuerpo de baile está bajo la dirección de la profesora Magdalena Cáceres, quien cuida cada detalle de la vestimenta y las coreografías.
Rubicón para lo noche del viernes tenía como invitados a dos jóvenes solistas, cantadores con unos potentes registros con los que conquistaron al numeroso público que no dejo de aplaudirles en cada una de sus interpretaciones. Desiré Hernández, joven lanzaroteña componente de la Agrupación Folclórica Guagime de Tahíche que se inició en el folclore siendo una niña en la Escuela Municipal de Folclore de Teguise y en la actualidad, no solo participa cantando sino que además es la responsable de dirigir el cuerpo de baile de dicha agrupación.
El otro invitado de la noche fue el joven Mateo Felipe de Icod El Alto, Los Realejos en Tenerife que pese a su juventud cuenta con una amplia trayectoria unida siempre a la música y bailes tradicionales canarios. En la actualidad es componente y director del grupo 'Los Trigales'. Mateo ha nacido en el seno de una familia musicalmente arraigada a las tradiciones que ha colaborado con varias agrupaciones como Taburiente, Mestisay, Los Gofiones Sabinosa, Tigaray etc.
Junto a Desiré Hernández y Mateo Felite también se unieron las magnificas voces de los solistas de Rubicón consiguiendo entre todos los objetivos marcados dejando el pabellón muy alto.
Por último, hay que destacar que el festival comenzó con los acordes instrumentales de timple y guitarra como acompañamiento a la lectura de un emotivo poema compuesto por César Rijo Eugenio, miembro de Rubicón que recibió como premio el aplauso del público. Con la entrega de obsequios y al ritmo de una Isa Parrandera se ponía el broche final.
