Barrios Orquestados presenta su nuevo espectáculo Cuerdas con el fin de sensibilizar sobre las fronteras políticas y culturales. El proyecto músico-social se embarca de nuevo en una idea ambiciosa que aúna múltiples disciplinas como la interpretación musical, la danza o la puesta en escena, todo ello incluyendo la participación del público.
La producción, a través de un formato elástico y dúctil, se adapta para ser replicada en Gran Canaria, Fuerteventura, Lanzarote y Tenerife, respectivamente en el mes de junio, con la implicación de los niños, niñas, jóvenes y familiares que participan en las orquestas y en los coros presentes en cada una de estas islas.
Tras el estreno en Gran Canaria y Fuerteventura, Cuerdas tendrá lugar en Lanzarote el domingo 23 de junio. El Teatro Municipal de Tías, cedido por el Ayuntamiento de Tías, abre sus puertas para recibir a las familias del proyecto. Por último, el público tinerfeño tendrá la oportunidad de asistir el sábado 29 de junio al Auditorio Municipal de la Matanza de Acentejo, con la colaboración del ayuntamiento local.
“La cuerda es la materia semántica y metafórica a la que nos aferramos para argumentar una historia cuya trama nos sumerge en los dramas más acuciantes, sociales y psicológicos de la condición humana”, explica José Brito, director del proyecto.
“Este espectáculo tiene la misma base que todos nuestros espectáculos, es un mensaje de paz y muestra el poder que tiene la música como herramienta para transmitir valores”, afirma Polo Vallejo, compositor y co-creador de la obra. Se trabaja de forma simultánea en las cuatro islas desde comienzos de año. Ninfa Santana, la coach de interpretación que apoya las labores de docencia destaca el tesón de niños y adolescentes: “Proceden de barrios diferentes, de realidades diferentes, sin embargo, cuando llegan a los ensayos todos y todas se muestran como verdaderos actores”.
En cada isla en la que se representa este espectáculo intervienen todos los niños, niñas y jóvenes, de edades comprendidas entre los 4 y 18 años, y sus familiares presentes en el proyecto músico-social Barrios Orquestados. Suman un total de 609 personas: 260 en Gran Canaria, 162 en Tenerife, 106 en Lanzarote y 81 en Fuerteventura.
Bajo la dirección musical del joven compositor Álvaro Díaz, el acompañamiento instrumental presente a lo largo del espectáculo correrá a cargo del ensemble Cuerdas, un grupo de músicos profesionales de cuerda frotada y percutida viento-madera y percusión.
Las fronteras se desvanecen en este espectáculo por varias razones. Dará comienzo en el espacio exterior de los teatros donde un orquestado pasacalle infantil guiará al público a las butacas. Esta propuesta pretende concienciar y sensibilizar sobre cualquier diferencia política y cultural utilizando la cuerda como elemento metafórico. Cada una de las piezas manifiesta un trasfondo partiendo de la crítica social: la migración, la guerra, la desigualdad, etc.
La interactividad es una de las grandes apuestas de este nuevo espectáculo de Barrios Orquestados. El proyecto rompe la cuarta pared propiciando que el público sea un elemento interpretativo más en todo el entramado escénico mediante cantos, simples coreografías y efectos sonoros varios. Cada asistente encontrará en los asientos un libreto de mano, impreso con el auspicio de Fundación DISA, donde observarán las indicaciones para participar en cada pieza.
Las entradas tienen un precio-donativo de siete euros y podrán adquirirse a través de la web de TomaTicket. Toda la recaudación irá dirigida a la ejecución y producción de la obra que implica un conjunto de costes materiales y profesionales desde la iluminación, hasta la producción audiovisual. El espectáculo ‘Cuerdas’ quedará plasmado en una película que recopilará los cuatro estrenos, bajo la dirección cinematográfica de Amaury Santana.
Barrios Orquestados fue concebido en 2012 por José Brito y Laura Brito. Se inicia en el barrio grancanario de Tamaraceite para crear una orquesta con niñas y niños de entornos vulnerables a nivel socio-económico y con difícil acceso a la cultura. Desde entonces, se ha extendido a 13 sedes en cuatro islas –Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura– y ha cruzado el Atlántico hasta Chile y Honduras. Este proyecto ofrece formación musical gratuita a menores y a sus familias, con el préstamo de instrumentos a cada estudiante. De esta forma, la música es una herramienta de inclusión y desarrollo social.