Las trabajadoras de la lavandería del Molina Orosa han denunciado la situación de "gravedad" con la que trabajan debido a las altas temperaturas durante su jornada laboral. Las empleadas han contactado con La Voz tras el ingreso hospitalario de una de ellas por un "golpe de calor" el pasado viernes.
"Sufrió un golpe de calor, había hasta 37 y 40 grados allí dentro", ha manifestado una de las trabajadoras. La mujer tuvo que ser trasladada a Urgencias e ingresada ese mismo día por el calor que se respiraba en la zona de trabajo.
"No es la primera vez que pasa algo así, llevamos más de cinco años con la misma situación", ha concretado, aunque "normalmente las empleadas no acuden a urgencias por ese motivo", ha relatado.
Desde la Gerencia les recomiendan que "vayan al hospital para que haya una estadística", pero "nadie toma medidas para evitar estos casos", ha señalado la mujer. "Estamos en un riesgo grave de vida o muerte", ha concretado al periódico.
Las mujeres, que muchas rondan más de 50 años, muestran su "preocupación" y las consecuencias que les han creado esas condiciones de trabajo. "Tenemos mucho estrés mental y con graves patologías", han apuntado.
Además, las instalaciones no cumplen con la seguridad adecuada para que se realicen las jornadas laborales. "Hemos pedido que cubran las mesas eléctricas para que no nos pase la corriente, pero se limitan a poner carteles", ha añadido. "No hacen nada, dicen que no hay presupuesto", ha asegurado.
El conjunto de trabajoras y trabajadores han comunicado lo ocurrido por escrito y en conversación con el técnico de prevención de riesgos laborales. "Se limitó a decir que no podía hacer nada más que enviar informes a la Gerencia del hospital y que no se querían tomar medidas", ha desvelado la denunciante.