Lleva dos años y medio viviendo en San Bartolomé, en una vivienda de nueva construcción, cuyo aljibe está forrado con un "liner plastificado". Al poco tiempo de que Juan Rodríguez comenzara a vivir en esta casa, "el agua del grifo empezó a salir de color marrón", ha asegurado en una queja enviada a La Voz.
"A día de hoy, el color del agua cuando abro el grifo sigue siendo marrón. El aljibe tiene el fondo completamente lleno de tierra en tan sólo dos años y medio", ha señalado este vecino.
"Se podrán imaginar lo limpia que queda la ropa y la vajilla con ese agua, cómo se queda el agua de la cisterna cuando la tiras, cómo estará el termo de barro por dentro, el lavavajillas y la lavadora. Cuando vas a bañar a los niños ves que el agua es tierra, igual que cuando te vas a lavar los dientes", ha denunciado.
Este vecino se puso en contacto con Inalsa para explicarles su problema. Unos días después, la empresa pública envío a una persona para que recogiera muestras del agua, pero aseguró que "estaba clara". "Le invité a que viera cómo sale el agua por el grifo y el fondo del aljibe. Me dijo que no, que eso era propiedad privada y él no podía entrar", ha señalado.
En resumen, según ha indicado Juan Rodríguez, Inalsa "se desentiende de todo el barro que han metido en el aljibe". "Yo me tendré que, o bien buscar a alguien que me lo limpie todos los años, o a un fontanero que me suba el tubo de la hidro e instale filtros", ha señalado. Mientras tanto, la factura del agua "se le disparará". "En vez de mandarnos agua, nos mandan barro", ha lamentado.