De la noche a la mañana una publicación viral en redes sociales puede cambiar la realidad de un destino. Así le ha ocurrido a la zona de Las Grietas en Lanzarote. En los últimos años este espacio se ha hecho popular entre los turistas que, cámara o smartphone en mano, deciden dirigirse a Montaña Blanca para observar estas formaciones rocosas y compartirlo en Instagram o TikTok.
Ya el pasado mes de noviembre el Cabildo de Lanzarote anunció que barajaba la posibilidad de cerrar el aparcamiento, un pequeño apartadero sin asfaltar ni señalizar ubicado en la LZ-35 entre San Bartolomé y Tías, para habilitar redes de senderos que permitan a los visitantes acceder de forma segura al lugar. Sin embargo, eso aún no ha ocurrido.
Por el momento y tal y como denuncia un lector a La Voz, este espacio acoge los fines de semana a cientos de personas que dejan el coche en espacios no permitidos, para cruzar por la carretera o a través de un paso de agua hasta llegar a este espacio. "Es una locura. No hay nadie aquí con cartelitos que pongan no pasen por aquí, no se suban aquí o no tiren mierda", revela el lector.
"Si no hay alguien que coma de esto no van a hacer nada", apostilla. Entre carteles, cerrar senderos con elementos que se mimeticen con el entorno y contratar a una persona para informar: sacas a gente del paro, las formas. Yo veo a gente que parecen hormigas, causando erosión y daños que son irreversibles y hay de mierda, colchones, hay de todo".