Especialista de Hospiten alerta sobre el "alarmante aumento" de las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en mujeres mayores de 45 años. A pesar de la creencia errónea de que las ITS afectan principalmente a la población más joven, diversos estudios a lo largo de los años demuestran que las personas de 45 años en adelante también están en riesgo.
El jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia de Hospiten Roca, el Dr. Carlos Blanco-Soler Palacios-Pelletier, afirma que “es crucial comprender que la menopausia puede aumentar el riesgo de infecciones en mujeres mayores de 45 años debido a la disminución de defensas y cambios en la flora vaginal. La detección precoz y la concienciación son fundamentales para evitar complicaciones graves”.
"Es crucial concienciar a la población sobre la importancia de cuidarse, ya que nadie está exento de contraer una ITS". "Las estadísticas globales respaldan la gravedad del problema", con más de 350 millones de personas en el mundo afectadas por enfermedades como clamidia, gonorrea, sífilis y más de 500 millones portadoras del virus del herpes genital, además de 290 millones infectadas por el virus del papiloma humano, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Un aspecto preocupante es que la mayoría de las infecciones son asintomáticas, lo que significa que las personas pueden no ser conscientes de su condición hasta que se desarrolla un cuadro grave. La medicina preventiva se vuelve esencial, instando a la población a buscar atención médica ante el menor síntoma o al iniciar una nueva relación".
En el contexto español, los datos del Instituto Nacional de Estadística revelan una tendencia ascendente en las ITS desde 2005, con un "aumento considerable" en el número de casos por cada mil habitantes. Por ejemplo, la sífilis pasó de 3,93 casos a 13,97 por cada 100.000 habitantes entre 2005 y 2021. La clamidia también ha experimentado un aumento significativo desde que se considera una enfermedad de declaración obligatoria en 2015.
"En eventos sociales, como los carnavales, es común que las personas subestimen los riesgos de las ITS, creyendo erróneamente que afectan solo a otros. Romper con esta percepción es crucial, reconociendo que, al iniciar una nueva relación, se suman las experiencias previas de ambas partes, generando una red compleja de contactos. Por lo que se sugiere prudencia al establecer nuevas relaciones, e incluso la realización de análisis como medida preventiva".
"La necesidad de un enfoque conjunto para el tratamiento de las ITS se destaca. La negativa de uno de los miembros de la pareja a seguir el tratamiento puede resultar en la persistencia de la infección, lo cual se observa comúnmente en la práctica médica. Además, se enfatiza la gravedad de las infecciones cuando ascienden, pudiendo causar complicaciones serias, como inflamación del endometrio o incluso cuadros equivalentes a apendicitis aguda".
Finalmente, desde Hospiten se subraya la "necesidad de un diagnóstico y tratamiento precoces para abordar las ITS de manera proactiva".