En estas fechas se habla mucho de inmigración. Se han escuchado opiniones muy diversas y , valga la redundancia, de diversa procedencia; lo cual nos parece interesante ya que es un debate que incumbe a toda la sociedad española, y en modo especial la lanzaroteña.
Sin ánimos de restarle importancia a dicho debate, sino al contrario, tratando de enriquecerlo; creo que también los saharauis, a menudo olvidados o ignorados, y que , por un lamentable y vergonzoso "desajuste político", cuya historia todo el mundo conoce (con más claridad la generación anterior a la actual), se nos empujó a la diáspora y la emigración, convirtiéndonos en nómadas eternos en contra de nuestra voluntad; también tenemos algo que decir al respecto.
Como sentenció un experto en inmigración en una conferencia sobre mediación intercultural, a la que tuve el placer de asistir, "los desplazamientos humanos, al igual que la emigración animal, son fenómenos naturales imposibles de frenar", en todo caso, atendiendo a múltiples factores socioeconómicos, se pueden regular o disminuir.
En este contexto, creemos que es primordial que Europa, en general, y Canarias, en particular,debe abogar por la independencia del Sahara Occidental, dado que un Sahara independiente y próspero, no solo paliaría y absorbería gran parte de la emigración subsahariana, en condiciones humanamente dignas, sino que actuaría como un muro positivo de contención para la buena vecindad entre Europa y África, cambiando la fama de "playas de náufragos y cadáveres desconocidos" por la que actualmente, por desgracia, se conocen ambas riberas.
De esta forma no sólo se contribuiría a la búsqueda de soluciones convincentes al drama de la inmigración, sino que también se daríacumplimiento a la legalidad internacional, efectuando el referéndum de autodeterminación que el pueblo saharaui y sus amigos en todo el mundo llevan trece años esperando, y se daría fin a un conflicto que data de 30 años.
ABDERRAHMAN BUHAIA