Por fin ha llegado. Ayer se aprobó la legislación y hoy ya se respira de otra manera. Hoy somos un poco más libres, un poco más responsables, un poco más tolerantes. Hay que destacar que escasos son los países que gozan del privilegio que ahora vamos a tener en España. No todos los grupos parlamentarios querían ceder el paso a este giro social que esta nueva misiva nos va a traer pero por la mayoría se aceptó y ahora no valen pataletas.
Ha llegado una nueva manera de ver la vida, una nueva forma de compartir, otra forma de manejarse, y de lo que estoy seguro es que va a ser para bien. Esa es mi opinión, pero si al final resulta que nos hemos equivocado y que dimos un paso atrás, habrá que levantar cabeza, mirar a ambos lados y dar dos pasos hacia delante. Lo que, como yo, muchísima gente tiene claro es que este cambio ya se respiraba en nuestro país y era tan necesario como obvio.
Muchos hablan de las complicaciones que vamos a tener a partir de ahora y no sólo aquellos a los que la ley implica directamente desde que se levantan por la mañana, sino también a muchos otros que somos meros peatones observadores de la sociedad actual.
A los que hablan de la ley como un retroceso y amenazan con una nueva Sodoma y Gomorra, les diría que no es ese el propósito, la idea no es el «todo vale» y para eso precisamente se desglosa en diferentes puntos. Es mas, yo diría que todo lo contrario, es una manera de regularizar, concretar y ordenar un poco todo el caos que se nos viene encima cuando nos vemos obligados a parar y escuchar a esas parejas que no queremos ver pero nos reclaman la atención en nuestro camino.
Por eso, y aunque a mi no me afecte demasiado, desde aquí quiero dar la enhorabuena a todos los que la han hecho posible. Gracias a todos por aprobar la Ley del Carnet de Conducir por Puntos.
David Sergio