Opinión

Felicidad Interior Bruta

Rebecca Gigon Button El Reino de Bután, es un país sin salida al mar, montañoso y de pequeño tamaño, situado en Asia central. Se localiza en el tramo oriental de la cordillera del Himalaya, entre India y China. Influenciado por el budismo ...

Rebecca Gigon Button
El Reino de Bután, es un país sin salida al mar, montañoso y de pequeño tamaño, situado en Asia central. Se localiza en el tramo oriental de la cordillera del Himalaya, entre India y China. Influenciado por el budismo ...

El Reino de Bután, es un país sin salida al mar, montañoso y de pequeño tamaño, situado en Asia central. Se localiza en el tramo oriental de la cordillera del Himalaya, entre India y China. Influenciado por el budismo tántrico.

El cuarto Rey de Bután, filósofo, ha liderado el desarrollo de su reino a lo largo de los últimos cuarenta años. El cuarto Rey, querido y respetado por sus ciudadanos, decidió que la medida del desarrollo de su país no iba a ser el Producto Interior Bruto (PIB), como los países occidentales llamados civilizados y del primer mundo, sino la Felicidad Interior Bruta (FIB). El concepto de FIB lo describen sus propios ciudadanos ante la cámara con una sonrisa que no cabe en el objetivo: significa satisfacción e iluminación, dicen, tener las necesidades básicas cubiertas, significa no tener preocupaciones derivadas del deseo material.

Los cuatro principios básicos del Reino de Bután son:

1.- Eficiente gestión pública: Eficiencia desde el punto de vista humano, desde la medida de las personas. Eficiencia de los recursos públicos, entendido por el empeño de sus gobernantes de aplicar el capital del reino a las necesidades de sus habitantes. Se concreta en educación gratuita, sanidad gratuita y gestión transparente de los fondos públicos. No se gasta lo que no se tiene, no se desea lo que no es necesario. La corrupción no solo se persigue y castiga en los tribunales sino a pie de calle, las personas que cometen actos de corrupción sienten vergüenza, son repudiadas por sus familiares y vecinos.

2.- Desarrollo económico sostenible: Los ciudadanos de Bután no carecen de nada, pero tampoco derrochan nada. Su economía se desarrolla al ritmo de las necesidades de las personas, la medida es la persona, pero con el límite de los recursos propios del reino. Desarrollo económico ligado inevitablemente a la explotación de sus recursos y a la superveniencia de las nuevas generaciones. Los butaneses son conscientes de que son responsables de su propio FIB y del de las generaciones futuras. Tanto valor tiene el tiempo de trabajo como el tiempo del ocio y de la familia.

3.- Conservación del Medio Ambiente.- El desarrollo económico del país está íntimamente ligado con la eficiente gestión de los recursos naturales del país y del medio ambiente. Los butaneses usan el agua de sus ríos para generar energía, pero revierten al cauce tanto como aprovechan. Entienden el medio que les rodea como fuente de felicidad y de belleza, no como algo que les pertenece y que pueden sobre explotar, contaminar, exterminar y agotar.

4.- Respeto a la evolución personal, cultural e intelectual.- Los butaneses estudian gratis, las instituciones públicas defienden sus tradiciones y su cultura pero su idioma vehicular es el inglés, hablan un mínimo de tres idiomas y usan los medios de comunicación como vehículo para la cultura y el desarrollo intelectual. En pocos años han pasado de un solo canal de televisión a cuarenta. El índice de fracaso escolar aumentó, los niños dejaron de leer, actualmente se estudia por parte de las autoridades eliminar canales de televisión y moderar su contenido a programas educativos, escolares y culturales. La educación sexual es obligatoria, se enseña en las escuelas las medidas de control de la natalidad y de prevención de las enfermedades venéreas.

El cuarto Rey de Bután cedió su trono a los cincuenta y seis años en la persona de su hijo, de veintiséis. Dijo que el momento de abdicar es el de la bonanza económica y el de la paz. Actualmente enfrentan la abolición de la monarquía, el actual rey considera que no es bueno para un país ser gobernado por una persona.

No es un cuento ni una utopía, el reino de Bután existe. Si tuviéramos que valorar nuestra Felicidad Interior Bruta me temo que no saldríamos muy bien parados. ¿Cuánto de Felicidad y cuánto de Bruto hay en el Interior de Lanzarote?