El otro día hablé en Facebook con una chica de Titerroy, de algo más de 40 años, que estudió en Sanjurjo y que jugó a balonmano en el San José Obrero. Me decía que en el balonmano "era del montón", de las que, ...
El otro día hablé en Facebook con una chica de Titerroy, de algo más de 40 años, que estudió en Sanjurjo y que jugó a balonmano en el San José Obrero. Me decía que en el balonmano "era del montón", de las que, según ella, pasaban desapercibidas. Tras hablar un poco me dice: "Sabes, tengo que darte las gracias porque yo me hiciera un futuro, me importara la vida y me diera cuenta de lo que es no vivir". Lógicamente, algo así emociona. Yo me emocioné, y también me hizo pensar.
Seguimos chateando y me decía que Tito y Tato (por no descubrir los nombres reales) no supieron, o no pudieron, captar el mensaje y, como otros chicos de entonces (años 80 del pasado siglo XX), les fue mal. Tito, me dijo, "era un colega de otros y conocido, que se metió en cosas raras u murió. Me dio mucha pena porque era buena gente". Tato, continuó diciéndome, "era o es un tío que estaba muy bueno, que ahora vive en el norte de Lanzarote y que pudo salir, o por lo menos lo deseo". Concluía esta chica de Titerroy aclarándome que "? eran del parque de Los Pinos y la Paciencia". Y, apuntilla que, como Tito y Tato, "muchos más, incluyendo los pájaros de la jaula" (que había en medio del parque Los Pinos), por efecto de la droga acabaron mal".
Como ya te dije hace unas semanas, lo mismo que Tito, Fulano, Zutano y el hermano de Mengano, que hoy tendrían entre 45 y 50 años, fallecieron. Por la droga.
Esta chica de Titerroy, de algo más de 40 años, en su perfil de Facebook no tiene foto, así que no me situaba en quién es. Pero, como soy muy curioso, le pedí saber quién era. Me respondió que "? no me vas a recordar, son muchos años y tuviste muy buena gente jugando en el equipo y no te acordarás de mí." Seguido me dijo que "? una vez me dijiste, "no dejes que nadie te diga, te pregunte o te estrese lo que tú no quieras"."
Luego de chatear un rato, me dijo: "Espero que no hallas cambiado y seas tú, me gustaba tu forma de ser y aunque estés o estuvieras en la política sigas siendo tú. ¿Vale?". Le respondí que, irremediablemente, su deseo estaba cumplido.
Imagina que nuestra chica de Titerroy, por estos días, que está comenzando el nuevo curso escolar, estará ocupada comprando los libros de sus hijos. Pero, ella sabe, y me gustará que tú también, que las cosas más importantes para la aprender a vivir no están en los libros. Ellalo sabe. ¿Lo sabes tú?
*Lorenzo Lemaur Santana, secretario regional de Educación del PP de Canarias.