Opinión

EL SECRETO DE UNA LARGA VIDA

"La vida es un viaje largoy uno se cansa de andar; por eso cuando se sientano se quiero levantar." Augusto Ferrán . La población del mundo ...

"La vida es un viaje largo

y uno se cansa de andar;

por eso cuando se sienta

no se quiero levantar."

Augusto Ferrán .

La población del mundo occidental ha ido envejeciendo progresivamente. Loa avances de la medicina de las últimas décadas han permitido prolongar la vida, pero no han logrado garantizar paratodos los que llegan "a viejos" que esta última etapa de su vida se desarrolle con la "calidad" necesaria. En cierto modo a medida que ha ido creciendo el número de individuos que alcanzan esta etapa, la vejez ha ido constituyéndose en una fuente de problemas diversos, de índole personal, antropológico, o socialy de carácter médico.

La ocupación mayoritaria de las plazas hospitalarias por personas que superan los 65 años, sus largas estancias y sus frecuentes reingresos, son hechos que están influyendo en el gasto sanitario y en la propia estructura y funcionamiento hospitalario. Esto ha llevado a plantear alternativas a la deshospitalización de la población anciana. Hay una tendencia a sacar a los viejos de los hospitales siendo el objetivo prioritario de la asistencia geriátrica, tratar de conseguir que el anciano permanezca, o se reintegre, en su domicilio habitual, en suficientes condiciones de bienestar y seguridad.

Se prevé que a dentro de pocos años los individuos cuya edad supere lo 65 años serán el 25% de la población, hecho que gravitará sobre el resto de la sociedad. La mayor parte de ellos residen en sus propias casas y presentan grados de dependencia variables que hace en ocasiones que, sin estar enfermos, no pueden valerse por sí mismos ni en su cuidado ni en el de su casa, por lo que se han desarrollado servicios de atención doméstica.

La vejez se ha convertido en una cuestión generadora de diferentes problemas, para poder darles solución es necesario un cambio de actitud individual y social frente a ella. Todos los estudiosos están convencidos del carácter multidisciplinar que requiere el tratamiento de estos problemas y de que la atención al anciano debe procurarleuna existencia digna tanto psicológica como físicamente, lo que implica tanto a los individuos como a los gobiernos y a la sociedad entera. Hay que señalar la necesidad de encontrar en el tratamiento de los problemas que genera la vejez un equilibrio entre autonomía y protección, entre responsabilidad individual y colectiva, e igualmente, es imprescindible salvaguardar los principios de libertad y respeto a la persona.

El individuo y la sociedad deben aprender a responder al reto con que los progresos de la propia medicina en su doble aspecto, curativo y preventivo, les está obligando a enfrentarse: una vida más larga, pero una vida con planteamientos diferentes, tanto a nivel individual y social como sanitario. Junto a esta preparación del individuo y de la sociedad para aceptar esta etapa de la vida con sus limitaciones y para colaborar en el mejor desarrollo de la misma, es bien cierto que los expertos insisten en que deben crearse los servicios sociales necesarios, convencidos de que el problema no se puede reducir exclusivamente a una cuestión individual, por lo que se hace indispensable la redistribución de los recursos existentes.

La vejez no sólo nos lleva a replantear el concepto de salud, sino que también nos lleva a replantear el propio estilo de vida que la sociedad está llevando, estilo ampliamente definido por la productividad, lo que explica que en determinados sectores existe una consideración marginalizadora de quienes han alcanzado esta etapa. Y como dijo el poeta: "Yo tengo hecha con el cielo / una escritura perpetua / de no marcharme del mundo / hasta que la muerte no venga".

Francisco Arias Solis