Entre los Soletes Repsol de Lanzarote, cuya última edición se acaba de presentar, los cocineros del universo Guía Repsol del país han elegido seis locales que los han sorprendido por su producto, servicio o personalidad.
Uno de ellos, Charco Vivo, en Arrecife ya había recibido un solete con anterioridad. Del restaurante ubicado en el Charco de San Ginés, destacan “sus bocadillos de pescado o calamares para desayunar. Se elaboran con la misma receta desde que su fundador Norberto Ginory abriera el negocio en 1960”.
Los chefs también han destacado en Arrecife la calidad del café en la cafetería Antípoda, en el centro de la capital, donde se encuentran “estupendas tostadas y una atención esmerada en el agradable entorno de la iglesia de San Ginés. Un buen lugar para desayunar”.
En Nazaret, el cocinero con Sol Repsol Santi Benéitez ha destacado La Cueva de Lagomar por su “impactante ubicación”, así como por sus “tragos de diseño y buena ejecución de los clásicos de toda la vida en su coctelería”.
La heladería Helathlon de Puerto del Carmen destaca por sus “elaboraciones artesanales de frutas de la isla, como por ejemplo, la pitaya roja. Destacan también por el helado de higos o las tartas semifrías”, explican.
En La Villa de Teguise destacan dos locales. Por un lado la Bodega Santa Bárbara, “ideal para tomar un vinito o una caña junto a sus originales propuestas para picar. Tienen también especialidades veganas como el hummus o el flan de la huerta”.
Y por otro lado, también en La Villa, los cocineros incluyen el Restaurante Ikarus. Entre sus especialidades han destacado su “milhojas de camembert y foie o el cherne en salsa de chipirón”.