En pleno centro de Arrecife, la brasileña Nubia Alburquerque da Silva, afincada en Lanzarote, decidió abrir su propio negocio después de dos décadas trabajando en hostelería. Hoy regenta el Café Saudade, que en portugués evoca el sentimiento de anhelar lo ausente. Con un aspecto de lo más vintage, el local está decorado con objetos antiguos, restaurados por ella misma.
Su propuesta gastronómica es saludable y de kilómetro cero, explica en una entrevista con el espacio radiofónico Más de Uno Gourmet. Ofrece ensaladas, poke bowls, tostas, humus o tartas, tanto para los que comen de todo, como para veganos y personas con intolerancias.
- ¿Cómo eligió el nombre de su cafetería?
Saudade es un poema de Clarice Lispector que tenemos expuesto en la cafetería. Es una escritora brasileña muy conocida. Ella cuenta que Saudade es un sentimiento que todo el mundo siente, todos hemos sentido la ausencia de algo, o de alguien.
Decidí ponerle ese nombre en homenaje a todas las personas que están ausentes de sus países, que han perdido a alguien, o que sienten la falta de algo del pasado que han perdido.
- ¿Qué podemos encontrar en Saudade?
Mucha gente confunde la palabra saudade con saludable, lo que también me viene bien porque, de hecho, tenemos comida saludable. (Risas).
En general, tenemos propuestas alternativas. Tanto para personas que comen de todo, como para veganos y personas con intolerancias. Tenemos ensaladas, poke bowls… todo kilómetro cero.
- ¿Cuál es su producto estrella, el que más disfruta elaborando?
En realidad disfruto cada momento porque tenemos una carta, pero no la seguimos al pie de la letra. El día que vayan, van a encontrar algo diferente, hecho con mucho amor y dedicación.
Me encanta hacer pasteles, pero sobre todo hacer cosas nuevas. Nos piden mucho la tarta de zanahoria, que sería nuestro producto estrella. También una tarta de chocolate sin gluten, que puede tomar cualquier persona y es deliciosa.
La gente está encantada con el sabor de las propuestas, desde las las tostas, hasta el humus. Para mí es primordial que todos los clientes se vayan satisfechos y con una sonrisa.
- ¿Cómo surgió la idea de abrir este negocio?
La idea me la propuso mi hija. Yo llevo en Lanzarote 23 años y he dedicado mucho tiempo de mi vida a la hostelería en otros negocios.
Durante el confinamiento tuve un problema bastante importante de salud y nos planteamos que, si me sacrificaba tanto y dedicaba tanto tiempo a la hostelería, quizá lo podría hacer con mi propio negocio.
- Uno de los aspectos que más destacan los oyentes de tu cafetería es la decoración…
Pedí presupuestos para decorarla y me salía muy caro, no tenía suficiente dinero, así que decidimos decorarla con objetos viejos y usados que hemos restaurado con nuestras propias manos. Todo, desde la primera silla. Es una cafetería vintage.
- ¿Dónde está exactamente la cafetería y que horario tiene?
Desde las 07.30 hasta las 20.00 horas. En el número 98 de Manolo Millares.