También conocida como la isla de los volcanes, Lanzarote dispone de maravillosas playas para disfrutar de unos días llenos de buen clima, deliciosa gastronomía, actividades al aire libre y diversión sin parar. Es tal la variedad de bahías que prácticamente se adaptan a todos los gustos y tipos de viaje. Sin embargo, cuando se busque una que resulte integral, no hay duda que Playa Blanca es una de las más indicadas.
El mejor enclave de toda la isla
Geográficamente, playa Blanca pertenece al municipio Yaiza, ubicado al extremo suroeste de Lanzarote. Este punto goza de las temperaturas más altas de toda la región durante todo el año, incluso en temporada de invierno. De ahí que cada vez resulte atractivo para una escapada al mar sin importar la época.
En la actualidad playa Blanca se consolida como el enclave más visitado de toda la isla, registrando aumentos año tras año en los visitantes que recibe. Esto es motivado a la calidad de sus servicios como grandes cadenas de hoteles, variedad de restaurantes y por supuesto las mejores playas que se desarrollan bajo un exquisito clima que nada tiene que envidiarle al Caribe.
De hecho, Playa Blanca ha sido galardonada en varias ocasiones por sus cómodas prestaciones y las condiciones de su entorno en general, con espacios limpios y agradables para todos sus visitantes.
Encanto y diversión
En esta zona se encuentra uno de los puertos deportivos de mayor importancia en toda la isla. Su largo paseo marítimo está desarrollado junto al casco histórico, con una oferta comercial que está en pleno desarrollo, desde tiendas de artesanías locales hasta lujosas boutiques.
La mayoría de playas de esta área destacan por tener aguas cristalinas y en tonos turquesas, así como finas arenas blancas y doradas. Entre las más visitadas destacan Playa Flamingo y Papagayo, esta última es un complejo de diferentes calas que forman parte de una extensa reserva natural, se puede acceder hasta ellas andando, en bicicleta o coche, aunque las distancias son bastante grandes.
Algunas de sus playas resultan ser un contraste de arenas oscuras con aguas claras, esto es el resultado de las múltiples formaciones volcánicas que se encuentran en esta zona, siendo la de Los Ajaches una de las de mayor relevancia, misma que flanquea Papagayo.
Resultan perfectas para que toda la familia pueda practicar deportes acuáticos como esnórquel, piragüismo, paddle surf o incluso buceo. Gracias a la claridad de sus aguas es posible apreciar el fondo marino en su máximo esplendor.
Alojamientos confortables y con todas las comodidades
La lista de lugares para quedarse en este lugar es bastante amplia, desde los más lujosos y exclusivos hasta modestos pero encantadores alojamientos. Sin embargo si lo que se busca es un establecimiento confortable y que goce de todas las comodidades, el hotel playa blanca en Lanzarote THB Tropical Island es el indicado desde cualquier punto de vista.
El hotel Tropical Island de THB es de los más visitados en playa Blanca, tiene una clasificación de cuatro estrellas y cuenta con 16 piscinas y multitud de actividades para que las vacaciones en Lanzarote sean espectaculares y sobre todo placenteras, tanto para adultos como los pequeños de la casa.
Días llenos de actividades
Unas vacaciones cerca al mar siempre resultarán ideales, solo que cuando se trata de una estancia en Playa Blanca, las posibilidades de que resulten inolvidables son mucho más elevadas en comparación con cualquier otro destino costero en España.
Aparte de sus magníficas y variadas playas, este lugar tiene mucho más para dar. En primer lugar está la opción de visitar el faro de Pechiguera, considerado como Bien de Interés Cultural, desde aquí es posible obtener una de las mejores vistas de la isla, ya que por su ubicación y posición también sirve de límite urbano.
A solo treinta minutos en coche está el Parque Natural del Timanfaya, con más de 5.000 hectáreas de terreno y 25 volcanes en total, es un espectáculo visual para todos sus visitantes, quienes llegan atraídos por la singularidad de su paisaje. Los turistas tienen la posibilidad de realizar el recorrido sobre un simpático dromedario, una experiencia alucinante en especial para los niños.
En el puerto deportivo de Playa Blanca salen embarcaciones con rutas turísticas para conocer las poblaciones vecinas. Desde Fuerteventura se podrá apreciar una panorámica de toda la zona que de seguro permanecerá en la mente de todos los viajeros por largos años, una belleza desde todos sus ángulos.
No se requieren de mayores excusas o motivos para visitar Lanzarote y menos Playa Blanca, solo es cuestión de organizar las fechas, hacer las maletas y dejarse llevar por todas las maravillas que este destino tiene para ofrecer.