En España, y según los datos recogidos por IAB Spain y Elogia en 2016, un 74% de los internautas entre 16 y 60 años compran online. Esto significa 8 puntos más que el año anterior y a comparación con el año 2013 casi 40 puntos más.
¿Qué significan estos datos? Una de las respuestas es que el comportamiento de los consumidores está cambiando, y que estos cada vez más prefieren comprar por internet.
Ya sea por motivos de comodidad, ofertas, ahorro de tiempo o mayor oferta y posibilidad de comprar más rápidamente, el Ecommerce está cogiendo fuerza entre las opciones.
Como parte de nuestra vida cotidiana ya compramos por internet infinidad de cosas en las cuales ya ni nos planteamos si podríamos ir a un lugar físico a adquirirlos, como puede ser la compra de billetes de avión. Es que estamos delante de una evolución muy grande y positiva, pero esto también puede suponer muchos cambios, y no tan positivos, para el comercio tradicional.
¿Qué ventajas tenemos comprando online?
- Sin horarios. No hay ningún tipo de límite, podemos comprar cuando queramos sin tener que preocuparnos por cuando cerrarán, o cuando abrirán.
Para muchos esto es un todo, ya que debido a los horarios de trabajo muchos no tienen tiempo de salir de compras.
- Rápido. Hoy en día ya no tarda ni una semana a llegarte el pedido a casa, y hay compañías que con tan solo horas llama a la puerta de tu casa, como Amazon.
- Más abanico donde elegir, y poder comparar. Casi todas las tiendas online ofrecen un amplio abanico de productos donde poder elegir, ya sea accesorios para hombre, como libros o zapatos. En una tienda física tenemos el límite del espacio, tenemos el espacio que tenemos y nuestro stock será más limitado por ello.
- Solo tecleando "corbatas rosas" o "pajarita roja", se nos ofrece un abanico inmenso de posibilidades. Gracias a que Google clasifica los mejores resultados para nosotros.
- No nos tenemos que desplazar. Comprar desde el sofá, de la cama o con un café en la mano, sin ninguna preocupación, ni agobios por colas, gente, etc. Es un gran punto positivo.
¿Y los comercios tradicionales?
- Relación más personal. Las relaciones personales son las que crean el compromiso entre un comercio y un cliente. El que un dependiente te conozca y pueda enseñarte lo que te gusta, es un punto positivo, además creará esa relación para que ese cliente recuerde esa como una buena experiencia.
- Puedes probarte los productos. Muchas veces el miedo a comprar online es que no se sabe cómo es el producto realmente. Su tamaño, textura, si nos gustará cómo queda. Y esto es algo que en el comercio tradicional no pasa. Puedes comprobar su calidad, y probártelo, para saber si es eso lo que quieres comprar.
- Seguridad. Comprar en tienda, tenemos esa seguridad que si en alguna ocasión tenemos un problema podremos volver a acudir allí y solventarlo.
Sean cuales sean las ventajas, cada tipo de comercio tiene unas, y se puede pensar que ambas pueden convivir sin problemas, eso si, la competencia siempre estará allí.