"La gran mayoría del sector bodeguero de Lanzarote no nos sentimos representadas en el Consejo Regulador". Así arranca el comunicado conjunto que han suscrito seis bodegas de la isla, en medio de la crisis abierta en este órgano, que se evidenció el pasado viernes con la dimisión de la presidenta y cinco vocales de su plancha, que representaba a los viticultores.
En su escrito, las bodegas El Grifo, Los Bermejos, La Geria, Vega de Yuco, Castillo de Guanapay y La Grieta salen en defensa de la ex presidenta, Ascensión Robayna, cuya dimisión aún debe ser ratificada en el Pleno, y cuestionan con dureza el papel de los vocales que continúan en el Consejo Regulador, y que representan a bodegas más pequeñas.
"Los actuales vocales bodegueros, que apenas representan un 15 por ciento del sector, están entorpeciendo el normal funcionamiento del Consejo Regulador, hasta el punto de aburrir primero al director gerente (Javier Betancort) y más tarde a la presidenta y su plancha vitícola, todos los cuales han optado por presentar su dimisión, tras haber desarrollado una breve pero encomiable labor", sostienen en su comunicado.
Al respecto, subrayan que "al parecer", los viticultores tampoco se sienten representados por el Consejo, "como consecuencia de la dimisión de la presidenta junto con su equipo de vocales viticultores".
Sin elecciones a la vista
Tras presentar su dimisión, la propia Robayna confió en que esto supusiera la convocatoria de nuevas elecciones, pero desde el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), de quien dependen los Consejos Reguladores, ya respondieron que no se convocaran nuevos comicios y que se elegirá un nuevo presidente entre los vocales que continúan en el Pleno. Es decir, los cuatro que representan al sector de las bodegas, y los dos suplentes de la lista de los viticultores que no han presentado su dimisión.
En medio de esta situación, estas seis bodegas se han unido para cuestionar "el desgobierno y mala imagen que se está ofreciendo desde el Consejo Regulador" y para advertir de que esto "en ningún caso pueden ensombrecer el buen momento que atraviesa el sector vitivinícola de Lanzarote, fruto del buen hacer de todos sus operadores: viticultores y bodegas".
"Las bodegas y los viticultores siempre hemos mantenido relaciones estrechas y cordiales porque perseguimos el mismo fin, la buena marcha del sector vitivinícola. Sin uva no hay vino, y sin vino desaparece el paisaje de La Geria", advierten.