Después del confinamiento las mercancías tardan más en llegar y se han encarecido mucho los costes de transporte. ¿Puede explicárnoslo? ¿Podemos tardar en volver a la normalidad anterior?
El incremento de los fletes marítimos tiene su origen en el suceso del Canal de Suez, cuando en marzo del año pasado encalló el Ever Given, aunque ya durante el confinamiento se había experimentado una fuerte subida de precios.
Según datos de la OCDE, entre febrero y junio de 2021 se ha cancelado, aproximadamente, entre el 20% y el 30% de la capacidad de carga en las principales líneas marítimas comerciales, disparándose los precios especialmente en rutas transoceánicas.
Las navieras internacionales han incrementado sus fletes más de un 300% en plena crisis del covid y siguen aumentando. Por ejemplo, un contenedor de cuarenta pies desde Ningbo (en China) hasta Arrecife, venía costando antes del covid 4.500 USD. Durante el covid subió a 15.500 USD y actualmente estamos pagando sobre los 15.800 USD. Incluso hay que pagar un extra de 1.000 euros para conseguir una prioridad en el embarque.
Tardaremos bastante tiempo en volver a esos números de 4.500 USD por un contenedor de 40 pies. Para regresar a esos precios tendría que existir un aumento en el número de líneas y suficientes equipos vacíos en los puertos de embarque.
Por su parte, los tráficos desde Península a Canarias también se han visto afectados con subidas aproximadas de un 10%.
Con el transporte aéreo, en Lanzarote hemos vivido un suplicio durante el confinamiento. Había días en que no teníamos conexiones con Madrid para recibir radiofármacos o enviar pesca fresca, por poner un ejemplo. Independientemente de que el Gobierno decretase servicios mínimos, en algunos casos no se cumplieron. Obviamente, durante la pandemia se incrementaron los fletes aéreos, sobre todo en rutas internacionales. Sirva como ejemplo un envío de Lanzarote a Hong Kong, en plena pandemia, tenía un coste de 10 euros por kilo, actualmente son 6 € por kilo, pero antes del COVID eran 3 € por kilo. Actualmente todavía hay aerolíneas que no han abierto todas sus rutas.
¿Se están acentuando los retrasos en la entrega de mercancías en la aduana?
La aduana, al igual que todos los organismos estatales y autonómicos implicados en el despacho de mercancías, se implicaron al 100% durante la pandemia.
Por ejemplo, tenemos el caso de las mascarillas, los EPIs, etc. Obviamente, al principio hubo bastante confusión con la organización del teletrabajo en algún que otro organismo. Actualmente no tengo nada que objetar sobre el funcionamiento .
Los retrasos que leemos en la prensa o escuchamos en la radio son los provocados en paqueteras como Correos, que creo que todavía no han implementado la nueva normativa aduanera para los bajos valores.
¿Sigue teniendo sentido en el contexto actual el AIEM, Arbitrio sobre las Importaciones y Entrega de Mercancías en Canarias?
El AIEM es un impuesto directo que se aplica a la entrada en las Islas Canarias a algunas mercancías, que va desde un 5% hasta el 15%. Uno de los argumentos esgrimidos por el Gobierno de Canarias, es que su objeto es encarecer el precio del producto importado que compite con el local. El caso es que hay productos que no se fabrican en Canarias y están gravados con el AIEM o bien su producción es bastante limitada para abastecer al mercado canario.
Hay que recordar la importancia de que se declare como de Obligación de Servicio Público la línea Cádiz - Arrecife
¿Cómo se vivieron los días más duros del confinamiento en el transporte de mercancías insular? ¿Estamos recuperando los niveles de actividad?
Como todas las empresas de servicios, lo pasamos bastante mal y con mucha incertidumbre, además de sufrir un parón en seco de la noche a la mañana.
El sector vino a tomar un poco de oxígeno a mediados de agosto. Creo que no hubo desabastecimiento, gracias a las obligación de servicio público en el transporte marítimo y aéreo entre las Islas. Por eso, hay que recordar la importancia de que se declare como de Obligación de Servicio Público la línea Cádiz - Arrecife y viceversa que lleva años reclamándose.
Actualmente se va recuperando la actividad, aunque está muy sujeta a los flujos turísticos. Con todo esto, se ha evidenciado una vez más que las empresas conejeras dependemos en un 90% del turismo.
Con el Brexit necesitamos el P.I.F. animal con urgencia
En los últimos años, se han realizado importantes inversiones en el aumento de la capacidad y abrigo del puerto de Arrecife. ¿Quedan necesidades por cubrir en el ámbito logístico insular?
Por supuesto que nos faltan por cubrir necesidades en nuestro puerto, ya que todavía está pendiente el P.I.F. para mercancías de origen animal. Hasta el momento solo tenemos en funcionamiento el P.I.F. vegetal con una gran actividad. Pero ahora con el Brexit necesitamos el PIF animal con urgencia. Y es que al abandonar el Reino Unido la Unión Europea, todas sus mercancías están consideradas aduaneramente como si fuese un tercer país no comunitario. Esta demanda del P.I.F., desde los años 90, no es un antojo empresarial, como pueden pensar algunos, es una necesidad de la isla para mantener sus flujos comerciales y atender al turismo inglés que es porcentualmente superior. Ellos consumen sus productos, por tanto, el P.I.F. es necesario.
¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta su sector en la isla?
Como para muchas pymes, el principal reto es la globalización en nuestro sector, por las multinacionales de la logística y transporte. Las empresas de nuestro sector podremos competir con estas multinacionales ofreciendo servicios exclusivos a nuestros clientes, como asesoramiento en comercio exterior, asesoramiento normativo en los distintos regímenes aduaneros, transportes especializados, etc.