Se trata de una medida de urgencia para paliar el excedente de uva de la cosecha de este año, de la que el Consejo Regulador estima que sobrará un millón y medio de kilos. Como medidas para el futuro, el organismo del vino en la isla, solicitó al Cabildo que intercediera con la Consejería de Medio Ambiente para poder llevar a cabo la ampliación de las bodegas y así poder asumir más cantidad de vino. Según ha informado a este medio el consejero de Agricultura del Cabildo, Higinio Hernández, la presidenta Inés Rojas se trasladó a Gran Canaria para "dar solución al tema" en una reunión con el consejero de Medio Ambiente del Gobierno regional, Domingo Berriel.
Tal y como está formulado el Plan Insular de Ordenación, "las bodegas no pueden ampliarse" apuntó Higinio Hernández, pero mantiene que el Cabildo "está en la línea de los bodegueros, apostando por el futuro", aunque también matizó que la Primera Institución "no tiene la culpa de que haya agricultores que han plantado más viñas" y matizó que de eso tiene que ocuparse el Consejo Regulador.
El consejero de Agricultura asegura que el Cabildo está facilitando la tarea a los viticultores, mediante la subvención de tanques, pisadoras y otros materiales para los agricultores que no tengan los suficientes medios técnicos y además, ha habilitado un laboratorio en la Granja Experimenta, al que se dotará en unos días del sistema "Grape Scan" para analizar el vino y al que pueden acudir los viticultores. Por el momento y según Hernández al Cabildo le queda pendiente "lanzar una gran campaña de promoción" para vender los vinos lanzaroteño.