Se cumplen 50 años del nacimiento de una de las empresas emblemáticas de Lanzarote, Horinsa, constituida en 1973. Hormigones Insulares está dedicada a la construcción de obras públicas y grandes obras de iniciativa privada sobre todo en Arrecife, Playa Honda y Puerto del Carmen.
En una entrevista con Ekonomus, Francisco Armas, consejero delegado de Horinsa, repasa la historia de la compañía y sus principales hitos constructivos, entre los que se encuentran la Circunvalación Arrecife, la Vía Medular o el Centro de Interpretación del Parque Nacional de Timanfaya.
- ¿Cómo nace Horinsa?
En su origen, un grupo de emprendedores de Lanzarote decide cubrir una necesidad en el mercado de la construcción en la isla. La instalación de la primera planta de fabricación de hormigón preparado, así como la disposición de camiones hormigoneras para su transporte, a diferencia de como se hacía anteriormente, a mano y con bombos de obra.
"De nuestro trabajo destacaría la Circunvalación Arrecife, la Vía Medular y las grandes obras en puertos y aeropuerto"
- ¿Cómo se ha ido transformando la empresa desde sus orígenes?
Complementamos nuestra actividad al abrir la primera planta en la isla para producir aglomerados asfálticos para carreteras y la adquisición de toda la maquinaria necesaria para el transporte, extendido y compactado de dicho material. Luego invertimos en una instalación para preparar y clasificar áridos.
"La plantilla de Horinsa ronda el centenar de trabajadores especializados"
Con el tiempo, empezamos a construir todo tipo de obras, tanto de iniciativa pública como privada. También viviendas en distintas localidades, especialmente en Arrecife, Playa Honda y Puerto del Carmen, lo que contribuyó a paliar la carencia de viviendas residenciales en la isla. La plantilla directa media de Horinsa ronda el centenar de trabajadores especializados.
- ¿Cómo ha sorteado las distintas crisis, en particular el estallido de la burbuja inmobiliaria que se llevó por delante tantas constructoras?
Cincuenta años es un plazo lo suficientemente largo como par verse afectado por unas cuantas crisis. Con respecto a la última, en la llamada burbuja inmobiliaria, por prudencia, en años anteriores fuimos abandonado la promoción de viviendas y por tanto la incidencia de la crisis fue prácticamente mínima, a diferencia de otras constructoras-promotoras más expuestas.
"Por su singularidad, también conviene destacar el Centro de Interpretación del Parque Nacional de Timanfaya"
- ¿Cuáles son los proyectos de los que está más orgulloso?
Hemos participado en la inmensa mayoría de los proyectos de infraestructura de Lanzarote, pero por su trascendencia, señalaría la Circunvalación Arrecife, Vía Medular y las grandes obras en puertos y aeropuerto. Además, por su singularidad, conviene destacar el Centro de Interpretación del Parque Nacional de Timanfaya.
"Horinsa siempre ha escuchado a la sociedad lanzaroteña y ha estado presente en acciones de apoyo deportivo, cultural y de ayuda social"
- Tiene Horinsa alguna iniciativa de responsabilidad social corporativa o similar para con la sociedad de Lanzarote o de Canarias?
Horinsa puede presumir de contar con instalaciones que cumplen los requisitos medioambientales, avalados por tres sellos ISO en las áreas de Medio Ambiente; Calidad; y Seguridad y Salud.
Recientemente hemos conseguido la inscripción del Plan de Igualdad, siendo una de las primeras empresas constructoras de Canarias en obtenerla.
Horinsa siempre ha escuchado a la sociedad lanzaroteña y ha estado presente en acciones de apoyo en lo deportivo, lo cultural y en la ayuda social que ha sido necesaria.
- ¿Cuál ha sido su contribución más reciente?
En este 50 aniversario, Horinsa ha pensado en la comunidad local, que siempre ha participado de una manera u otra en nuestro devenir como empresa.
En agradecimiento y para dejarlo patente, el 21 de septiembre se inauguró la escultura 'Alisio', diseñada por el artista Eduardo Manrique, dedicada a Lanzarote.
'Alisio' esta instalada en la Rotonda de la Calle Mástil de Playa Honda y constituye una donación al Ayuntamiento de San Bartolomé para el disfrute de los habitantes de Lanzarote.